El Producto Interno Bruto (PIB) de Estados Unidos creció 2.1% a tasa real ajustada anualizada en el tercer trimestre, lo que ralentiza fuertemente el crecimiento respecto al trimestre anterior debido al resurgimiento de los casos de COVID-19, según la segunda estimación publicada este miércoles por el Bureau of Economic Analysis (BEA).
En el periodo de julio a septiembre, el aumento del PIB fue de 2.1% en ritmo anual, ligeramente menor al 2.2% esperado por los analistas.
De acuerdo con Bloomberg, el gasto del consumidor, que representa la mayor parte de la economía, creció 1.7%.
También lee: PIB de Estados Unidos crece 6.5% en el segundo trimestre; por debajo de las expectativas
Tras registrar un alza de 6.7% en el segundo trimestre, principalmente gracias a la campaña de vacunación, el crecimiento del PIB de Estados Unidos se ralentizó en el tercer trimestre.
“Un resurgimiento de casos de COVID-19 provocó nuevas restricciones y retrasos en la reapertura de establecimientos en algunas partes del país”, analizó el Departamento de Comercio.
El informe subraya cómo una combinación de un aumento en las infecciones por COVID-19, la escasez de suministro y las limitaciones laborales indujeron una fuerte desaceleración el último trimestre en el consumo personal. Los datos recientes, incluidas las ventas minoristas de octubre más fuertes de lo esperado, sugieren una nueva aceleración del gasto en los últimos tres meses del año.
Sin embargo, persisten los vientos en contra. El aumento de los precios y un colapso en la confianza del consumidor amenazan con limitar el gasto de los hogares, y cualquier empeoramiento de los persistentes cuellos de botella del transporte y los desafíos de la cadena de suministro observados en los últimos meses podría sofocar aún más el crecimiento.
La inflación, que está en su mayor nivel en 30 años en Estados Unidos, podría representar un freno adicional para el crecimiento.
*Con información de AFP