La mayor apuesta del gobierno mexicano para enfrentar la peor crisis económica que ha vivido el país desde 1932 fue no endeudarse ni brindar grandes estímulos fiscales, como lo hicieron diferentes países para mitigar el impacto de la pandemia del coronavirus. 

Si bien esta decisión brinda un mensaje de responsabilidad para mantener la estabilidad de las finanzas públicas, también significa que México podría ser uno de los países que más tardará en recuperarse de la caída de 8.5% que reportó en 2020, indicaron especialistas. 

El Saldo Histórico de los Requerimientos Financieros del Sector Público, la medida más amplia de la deuda, se ubicó en 12 billones 423,048.1 millones de pesos durante el primer trimestre de este año, un aumento del 0.8%, respecto del mismo periodo de 2020.

Dicho monto representó 49.2% del Producto Interno Bruto (PIB), lo que significó una reducción de 3.1 puntos porcentuales, respecto a lo que se reportó al cierre del 2020 de 52.3% del PIB, de acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda. 

El incremento de la deuda, con todo y la pandemia ha sido modesta respecto de otras economías. Hay países que tienen una calificación similar a la mexicana, pero han rebasado los niveles de deuda

dijo a EL CEO, Alejandro Saldaña, economista en jefe de Bx+.

Según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), la deuda pública bruta promedio en América Latina fue del 56.3% del PIB en 2020, lo que significó un incremento de 10.7 puntos porcentuales, respecto del 2019. 

Entre los países que más elevaron su deuda destacan Argentina y Brasil, cuya deuda representó 104.5% y 89.3% del PIB; mientras los que menos se endeudaron fueron Paraguay y Chile, con 30.1% y 32.5%, respectivamente. 

México, de los que más se tardarán en recuperarse 

Ariane Ortiz-Bollin, analista soberano en México de Moody’s comentó que los apoyos fiscales que dio el gobierno mexicano para enfrentar la crisis por COVID-19 fueron pequeños a comparación de otras economías del mundo que abrieron la llave del gasto o de la deuda. 

Sí creemos que esto puede ser un factor para que la recuperación económica sea menos rápida de lo que sería (con más estímulos). Cuando comparamos entre países del G-20, México es el que más se va a tardar en recuperar el PIB del 2020

 dijo en una conferencia virtual, el pasado 12 de mayo

La especialista comentó que a partir de la reactivación económica de los Estados Unidos, Moody´s ha modificado su expectativa de crecimiento del PIB para México. Para este año prevé un avance de 5.6%, en 2022 de 2.7% y en 2023 del 2%. 

Impuesto a la riqueza dejará 1.5% del PIB… pero en 10 años

Para el subgobernador del Banco de México, Gerardo Esquivel, la respuesta de mayor gasto y endeudamiento para enfrentar la crisis no era tan obvia y sencilla y puso el ejemplo de Colombia, que está pasando por una de las peores crisis económicas y sociales de su historia. 

Pemex, complica situación de ingresos presupuestarios 

El estudio Panorama Fiscal de América Latina y el Caribe de la Cepal muestra que México fue uno de los países que mejor libró la crisis de la pandemia en materia de ingresos, pues presentó un crecimiento a diferencia de otras naciones cuyos ingresos cayeron respecto de 2019. 

Si bien México puede mantener un buen nivel de sus ingresos presupuestarios, los apoyos a Petróleos Mexicanos (Pemex) pueden significar un retroceso y una presión para las finanzas públicas del país, consideró Saldaña. 

En el mediano plazo se deben generar incentivos y otras medidas para que tengamos una economía más sana y que si se asumiera endeudamiento temporal se pueda ir pagando con mayor crecimiento

Para Saldaña, otro aspecto que genera dudas sobre una pronta recuperación es que el gasto público se está concentrando más en los programas insignia del gobierno, de los cuales se estima poca rentabilidad en el corto plazo como la refinería Dos Bocas y del Tren Maya. 

PIB per cápita reduce por habitante y crece pago de intereses por deuda 

Con este panorama, ve complicado que la deuda del país pueda bajar hasta 51% del PIB como contempla la Secretaría de Hacienda, especialmente porque están confiando demasiado en obtener mayores ingresos petroleros por el alza en el precio del crudo.