Un ataque con drones a una instalación de la empresa estatal Saudi Aramco en Arabia Saudita provocó una interrupción de crudo de unos 5.7 millones de barriles diarios a la oferta global, lo que puso de manifiesto la alta dependencia de algunos países a la producción saudí.
El ataque a la planta de procesamiento de crudo Abqaiq, el sábado, ocasionó que los precios internacionales del crudo se dispararan en promedio 16% en la sesión del lunes, su mayor alza en 30 años, dado que esto es cerca del 5% de la producción global y se trata de la peor pérdida de producción en la historia.
La amenaza de una interrupción prolongada del suministro de Arabia Saudita, el principal exportador mundial de crudo, destaca la falta de capacidad de producción adicional en el mercado, con el impacto de que esto se siente en los mercados de upstream (exploración y producción) y downstream (refinación y venta)
dijo S&P Global Platts en un informe.
Arabia Saudita produce cerca de 12% de la oferta global de crudo y de acuerdo con un reporte de Wells Fargo, el Reino suele actuar como una fuerza estabilizadora entre la producción de los países de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).
Aunque en la sesión del martes los precios del crudo referencial estadounidense, el WTI y el crudo del Mar del Norte, el Brent, se ajustaron 6.67 y 6.47%, respectivamente, luego de que la agencia Reuters dijo que la producción saudita podría regresar más rápido de lo esperado inicialmente.
El ministro de Energía saudita, el príncipe Abdulaziz bin Salman, dijo ayer que el Reino había restaurado aproximadamente la mitad de la producción perdida y que los niveles de producción volverían a la normalidad a finales de septiembre.
Los ataques a Arabia Saudita afectaron a los mercados mundiales, incluso a los consumidores que no compran petróleo del Reino
dijo el príncipe Abdulaziz bin Salman en una conferencia de prensa.
En México, un aumento en los precios del crudo representa mayores ingresos para el sector público.
Para 2020, Hacienda estimó un precio promedio de 49 dólares por barril para el crudo mexicano y calcula que, un dólar adicional en el precio, incrementa los ingresos por exportaciones de petróleo en 13,776 millones de pesos extras, equivalente a 0.5% del Producto Interno Bruto.
No obstante, el alza en el precio del crudo también genera presiones alcistas para los precios de las gasolinas que dependen del precio internacional del energético.
Si el precio del WTI se incrementara hacia los 65 dólares por barril, podría elevar los precios de la gasolina y el diésel en poco más de 7%, lo que llevaría a la gasolina Magna hacia los 21.29 pesos por litro, y a la Premium a 22.59 pesos por litro, mientras que el diésel se ubicaría en 23.27 pesos por litro, de acuerdo con un reporte de Gabriela Siller, directora de análisis económico de Banco Base.
Agrega que, en caso de que el gobierno redujera el IEPS de forma proporcional al incremento en el precio de los combustibles, y que dicho estímulo se mantuviera el resto del año, se podría observar una recaudación del IEPS 15.4% por debajo de lo presupuestado para el año de 269,000 millones de pesos.
Debemos esperar algunas noticias adicionales y un precio más alto que en meses recientes, considerando más riesgo a partir de dichos eventos. El reciente repunte en el apetito por el riesgo y menores tensiones comerciales globales podría también respaldar un precio ligeramente más elevado
escribió Esty Dwek, jefe de estrategia de mercado global en Natixis IM .
Tanto Estados Unidos como Arabia Saudita culparon a Iran por el ataque, sin embargo, el presidente Donald Trump, dijo que habilitaría la Reserva Estratégica de petróleo para contrarrestar la fluctuación de precios, pero aclaró que no iba a precipitarse en un nuevo conflicto en nombre de Arabia Saudita.
Mientras, el ayatolá Ali Khamenei, líder supremo de Irán, aclaró que no habrá conversaciones con Estados Unidos, luego de Trump comentó que podría tener una reunión con el presidente de Irán, Hassan Rouhani. “Los oficiales de Irán nunca hablarán con América. Esto es parte de su política para presionar a Irán”, dijo Ali Khamenei.
