Detener la caída de la producción de petróleo es uno de los varios desafíos que enfrentará el presidente Andrés Manuel López Obrador y de la cual dependen varios de sus planes, como acelerar la producción de gasolina; sin embargo, la suspensión de las rondas petroleras podría complicar estas metas.
El presidente ha aclarado que no cancelará la reforma energética y respetará los 111 contratos petroleros que México ya tiene firmados con privados, pero dará una tregua de tres años para que estos contratos den resultado y mientras tanto no se harán nuevas licitaciones.
Lo que no queremos es que se tengan los títulos de concesión y solo se utilicen para especular; lo que queremos es que se produzca petróleo, porque necesitamos extraer crudo… se nos está cayendo la producción
dijo López Obrador esta semana en una de sus conferencias matutinas.
Desde su punto más alto, en el 2014, hasta octubre de este año, la producción de petróleo de México se desplomó 45.22%, al pasar de 3.38 millones de barriles diarios (mbd) a 1.85 mbd, de acuerdo con cifras oficiales.
La decisión de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) de posponer aparentemente las subastas de petróleo de aguas profundas de México durante tres años, probablemente no tenga una influencia importante en la producción de petróleo en el corto plazo, pero sí pueden afectar en el largo plazo
Edward Glossp, analista de Capital Economics .
En el largo plazo Glossop estima que esto podría restar entre 0.2 y 0.3% del potencial de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de México.
En este sentido, López Obrador, dijo este jueves que no cancelará la reforma energética para demostrar que quienes la aceptaron no solo fueron corruptos, sino también ineficientes.
“¿A poco no es importante dejar de manifiesto que no solo hubo corrupción? (…) En el caso de la reforma energética, lo que queda de manifiesto es que fue un fracaso, estoy esperando a los defensores de esta reforma hagan un ofrecimiento de disculpa al pueblo de México”, dijo el presidente.
Acelerar la producción de crudo resulta clave para el nuevo gobierno, que planea la construcción de una refinería en Dos Bocas, Tabasco, para aumentar la producción de gasolinas, dado que el país importa 74% de estas y los costos se incrementan con precios internaciones más altos del petróleo y un dólar más caro.
En los primeros ocho meses del año Pemex importó 957,313 barriles diarios de gasolina por 22,117 millones de dólares, desde 894,252 barriles diarios y 16,578 millones de dólares del mismo lapso del 2017.
De acuerdo con Capital Economics, la producción petrolera del sector privado aún es pequeña, con menos de 300,000 barriles diarios. Eso es menos del 2% de la producción total de México. Y han pasado aproximadamente tres años desde que las subastas de petróleo comenzaron a llegar a esta etapa.
Un reporte que la administración de Enrique Peña Nieto mandó al Senado dice que la producción de petróleo de México estará en un promedio de 1.8 mbd entre el 2019 y 2022, para incrementarse a unos 2.36 mbd en el 2024.
Mientras tanto, aunque las rondas petroleras se cancelen, las empresas que ya tienen contratos pueden hacer negocios en un mercado secundario, de acuerdo con S&P Global Platts.
Los bloques adjudicados hasta la fecha tienen una gran superficie de extensión con algunos bloques costa afuera de hasta 3,000 kilómetros cuadrados, que tienen múltiples objetivos potenciales de exploración y, por lo tanto, oportunidades de colaboración de la industria
S&P Global Platts.
Lo anterior implica que las petroleras que hayan ganado alguna licitación se puedan asociar o vender su participación. Por ejemplo, Vista Oil and Gas se asoció con Jaguar Exploración y Producción en mayo para explorar tres campos.
Además, la alemana DEA adquirió la cartera de exploración de Sierra Oil and Gas de 9,500 kilómetros cuadrados. Ha trascendido que la empresa está en la mira del gobierno de López Obrador ante sospechas de que tuvo una filtración de información por parte de Pemex para hacerse de un yacimiento petrolero que resultó ser uno de los más grandes descubrimientos de México.
Este domingo López Obrador presentará su plan de refinación en Tabasco, que incluye la rehabilitación de las seis refinerías existentes y la construcción de la de Dos Bocas; además, la próxima semana irá a Campeche para “iniciar la perforación de una buen batería de pozos petroleros para parar la caída en la producción”.
Y además, las importaciones de crudo serán la nueva maldición de Pemex