La inversión en el corto plazo en México perdió resiliencia durante noviembre pasado, manifestando debilidad en la demanda interna al cierre del 2022.

De acuerdo con datos desestacionalizados del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), la inversión fija bruta registró una caída marginal en el penúltimo mes del año pasado, de 0.0002%.

 

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Esta disminución del indicador que mide el comportamiento de la inversión en el corto plazo, misma que está integrada por los bienes utilizados en el proceso productivo durante más de un año y que están sujetos a derechos de propiedad, tuvo como antecedente un alza de 1.39% en el mes previo.

Además, en los últimos siete meses se presentaron cinco descensos del indicador que muestra cómo una gran parte del nuevo valor agregado bruto en la economía se invierte, en lugar de ser consumido.

Dentro de la inversión fija bruta, afectada por los elevados precios, el ciclo alcista de la tasa de interés y la presencia del fantasma de la recesión en México y Estados Unidos, resalta el aumento de 2.83% del sector de la construcción no residencial.

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Este incremento fue el mejor resultado en ocho meses y derivó principalmente de una mayor demanda de espacios industriales en el marco del nearshoring.

Nuevos proyectos

Para Banorte, en temas de inversión, las noticias sobre nuevos proyectos y ampliación de los ya existentes ha sido una constante en los últimos meses, particularmente en la industria automotriz.

De acuerdo con datos de la consultoría en bienes raíces Market Analysis, actualmente la industria automotriz y de autopartes ocupa el 44% del total de los metros cuadrados demandados por las nuevas compañías

detalla el grupo financiero.

Añade que, de acuerdo con un reporte de la empresa Directorio Automotriz, en el cuarto trimestre del 2022 México sumó 62 anuncios de nuevos proyectos de inversión provenientes de 17 países para este sector.

A lo anterior se suma que se identificó a Guanajuato, Coahuila, Nuevo León, Querétaro y San Luis Potosí como los principales receptores de nuevos proyectos durante todo el 2022.

Impulso del T-MEC

Por otra parte, Banorte opina que el sector automotriz obtuvo un impulso adicional debido al fallo favorable sobre las reglas de origen en el marco del T-MEC.

Aunque las nuevas inversiones probablemente se reflejen en los indicadores industriales en el mediano o largo plazo, anticipa que la derrama económica relacionada a las primeras etapas de implementación son lo suficientemente importantes para brindar de un impulso a la demanda doméstica.