Si bien el 85% de las empresas en México cuenta con un seguro contra daños, solo el 21.2% tiene acceso a financiamiento, un escenario que revela el nivel de inclusión financiera en el país a partir de los resultados de la Encuesta Nacional de Financiamiento de las Empresas (ENAFIN).
El nivel de inclusión de las 273,000 empresas consideradas en la encuesta correspondiente a los sectores de construcción, manufacturas, comercio y servicios es adecuado, ya que el 87% de las empresas declaró tener al menos un producto financiero, de acuerdo con la Fundación de Estudios Financieros (Fundef).
De acuerdo con el Censo Económico del 2019, en México había 6.3 millones de establecimientos.
Se aprecian dos fenómenos: El primero es que hay un mayor acceso al financiamiento por parte de las empresas medianas y grandes respecto del resto y el otro es que la principal fuente de financiamiento es la banca comercial
indicó Fundef en su análisis
Aunque existe una brecha en el acceso a servicios financieros, la encuesta revela los bajos niveles de solicitudes de crédito y las razones para no pedirlo, lo que a decir de Funfed indica que puede existir un fenómeno de exclusión voluntaria.
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Paralelismos y divergencias en inclusión financiera
También el organismo, detalló que existen comportamientos similares y divergentes entre personas y empresas.
En inclusión financiera, los paralelismos entre ambos grupos radican en que, tanto personas como empresas, inician por un producto de captación y un limitado nivel de inclusión en crédito.
Las diferencias, en tanto, se revelan en el mayor uso de pagos electrónicos y una inclusión elevada de seguros para las empresas, en comparación con la de las personas.
En cuanto a los niveles absolutos de inclusión, el principal reto de política pública y para el sector financiero en los próximos años es aumentarla para el producto de crédito
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Tendencia a usar menos efectivo
La ENAFIN refleja un buen uso de los productos de captación y de seguros, así como una alta utilización de los canales transaccionales tradicionales que ofrece la banca como la sucursal. Sin embargo, hay una tendencia a usar menos el efectivo.
Sobre qué tan relevante es el uso del efectivo como único medio de pago para las empresas de la ENAFIN, el nivel de aceptación de solo efectivo es muy bajo.
Para hacer sus transacciones, las empresas prefieren realizarlas en sucursal o en línea, pues utilizan menos otros canales como es el caso del bajo uso de los cajeros automáticos.
El porcentaje de empresas que reciben pagos electrónicos con tarjeta es muy alto en el sector de comercio y de servicios y menor en los otros dos, lo que es consistente con su actividad, además, Fundef destacó que el uso de los canales para hacer transacciones no depende del tamaño de la empresa.
