Los incentivos fiscales anunciados por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) para impulsar las inversiones por nearshoring fueron recibidos positivamente por organismos y analistas, aunque señalaron pendientes para sacar mayor provecho de este fenómeno.

 Es un aliciente en materia de inversión (…) Favorecerá a muchas empresas que estarán o están buscando aprovechar el nearshoring en sus modelos de negocio

comentó Ramón Martínez Juárez, docente de la Escuela Bancaria y Comercial.

El académico comento que además de inversiones que impulsarán el empleo, los beneficios planteados permitirán la renovación en investigación y desarrollo en nuevas tecnologías que impulsarán la modernización de las empresas, así como la especialización en sectores como los semiconductores.

Tanto la Cámara Nacional de Manufacturas Eléctricas (Caname) como la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) celebraron la formalización de los beneficios para capitalizar la relocalización de cadenas de suministro.

El decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación aplicará a empresas de una decena de sectores altamente exportadores en cualquier parte del país, como componentes electrónicos, semiconductores, baterías, motores, fertilizantes o el farmacéutico.

De acuerdo con el documento, estos contribuyentes podrán acelerar deducciones de inversiones de entre 56% y 89% este año y el siguiente, así como acceder a una deducción adicional de 25% por tres años para gastos de capacitación de los trabajadores.

Los pendientes

Sin embargo, el organismo que lidera José Abugaber, consideró que el decreto debe ampliar su alcance a más sectores que los 10 mencionados.

“Tales como industrias de semiconductores, automotriz (especialmente en la electromovilidad), eléctrica y electrónica, dispositivos médicos y farmacéuticos, la agroindustria, de alimentación humana y animal, así como industria cinematográfica y audiovisual”, apuntó Concamin en un comunicado.

Gabriela Siller, directora de Análisis Económico en Banco Base, señaló en su cuenta de X que si bien los incentivos son buena noticia, falta promoción de México en el exterior, paquetes de ayuda para quienes se instalan en el país y asegurar la infraestructura suficiente.

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Este último rubro ha sido citado en diversos análisis como uno de los desafíos de México en materia de nearshoring, junto al suministro energético e incluso la seguridad.

Juan Francisco Torres-Landa, socio de la firma legal Hogan Lovells, indicó previamente que el conjunto de factores de seguridad (jurídica y física), energía e infraestructura son clave en una decisión de inversión y la falta de cualquiera de ellos “prende los focos” sobre la viabilidad de un lugar para instalarse.

“Si en ese conglomerado de factores no se hace la tarea, México puede perder su vigencia en esta ventana histórica”, afirmó el abogado. 

Ramón Martínez apuntó que los incentivos fiscales se quedarán cortos si el gobierno no los acompaña con esfuerzo coordinados en materia de seguridad.

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