Rodrigo A. Rosales
La desocupación del país disminuyó durante el penúltimo mes del 2021, aunque la informalidad laboral aumentó. Es decir, los nuevos ocupados incursionaron al mercado de trabajo en su modalidad informal.
De acuerdo con datos desestacionalizados del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la tasa de desocupación descendió a 3.83% de la población económicamente activa (PEA) en noviembre del año en curso, frente a 3.87% en octubre, dando una disminución marginal de 0.05 puntos porcentuales.
Sin embargo, la tasa de informalidad laboral 1 (TIL1) creció, al pasar de 55.58% en octubre a 55.69% en el onceavo mes del año.
La TIL 1 considera sin duplicar, según el Inegi, a la población ocupada que es laboralmente vulnerable por la naturaleza de la unidad económica para la que trabajan, con aquella cuyo vínculo o dependencia laboral no es reconocido por su fuente de trabajo.
Conoce los resultados de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo Nueva Edición #ENOEN, con cifras oportunas durante noviembre de 2021.https://t.co/4QJhiiGZob #INEGI pic.twitter.com/mDa2upJTF1
— INEGI INFORMA (@INEGI_INFORMA) December 23, 2021
También incluye ocupados por cuenta propia en la agricultura de subsistencia y trabajadores que laboran sin la protección de la seguridad social y cuyos servicios son utilizados por unidades económicas registradas.
El 28.10% de la PEA en la informalidad
Otro indicador sobre informalidad es la tasa de ocupación en el sector informal 1 (TOSI1), la cual incrementó de 28.10% de la población ocupada del país en octubre a 28.83% en noviembre.
La TOSI1 considera a todas las personas que trabajan para unidades económicas no agropecuarias operadas sin registros contables y que funcionan a partir de los recursos del hogar o de la persona que encabeza la actividad sin que se constituya como empresa.
De este modo, esta actividad no tiene una situación identificable e independiente de ese hogar o de la persona que la dirige, detalla el Inegi.
Con los resultados anteriores se observa que el desempleo en México marca una tendencia descendente, pero parte de los nuevos ocupados está tomando la dirección de la informalidad.