Para la economía mexicana, el segundo semestre del año mandó señales mixtas: sigue por arriba de las expectativas de crecimiento, pero ya se observa una tendencia de desaceleración.

El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reveló que el Producto Interno Bruto (PIB), con cifras desestacionalizadas y oportunas, creció 3.57% a tasa anual en el periodo abril-junio del 2023.

 

Puedes leer: En México, más de 40% de los hogares no tiene recursos garantizados para comida

Del lado positivo, la actividad económica del país lleva un año consecutivo con alzas superiores a 3.5%, además de que en la primera mitad del año se ubicó por arriba de las expectativas del gobierno federal (3%).

Aunque del lado negativo, el aumento del PIB nacional fue el más bajo en los últimos cuatro trimestres.

Factor terciario

Por actividad, el mayor crecimiento anual se dio en las terciarias, con 4.06%, el segundo incremento al hilo por encima de 4%; esto manifiesta la resiliencia que ha mostrado el consumo a lo largo del año.

Te puede interesar: Pemex vuelve a reducir su meta de procesamiento de crudo para 2023 

En tanto, las actividades secundarias, apoyadas en gran medida por la industria de la construcción y el repunte de la economía de Estados Unidos, presentaron una variación anual de 2.56%, superando el 2.41% del primer trimestre; las primarias aumentaron 2.49%, el peor resultado en tres trimestres.

A tasa trimestral, el PIB nacional ascendió a 0.91% en el lapso abril-junio del 2023, consiguiendo siete trimestres seguidos con alzas, pero inferior a la variación de 1.02% del trimestre previo, manifestando una tendencia de desaceleración.

Para la segunda mitad del año se estima que el PIB nacional pierda fuerza por el impacto del endurecimiento monetario, una inflación elevada y un menor dinamismo en la economía mundial, aunque el nearshoring y la implementación del T-MEC podrían actuar como compensadores.

Para más información visita nuestro canal de YouTube