La deuda neta del país, el llamado Saldo Histórico de los Requerimientos Financieros del Sector Público (SHRFSP), se aceleró a un total de 12.073 billones a junio, lo que implicó un alza de 1.203 billones frente al cierre de 2019.

De esta manera, el SHRFSP representó 55.8% del Producto Interno Bruto (PIB), de acuerdo con el último informe trimestral de Finanzas y Deuda Pública de la Secretaria de Hacienda.

Uno de los factores que más pesan para el aumento de la razón Deuda/PIB, es la caída que sufrió el PIB, ya que con esto, el denominador se vuelve más pequeño aunque el gobierno no emita más deuda de lo planeado.

El Producto Interno Bruto (PIB) tuvo un desplome de 17.3% frente al trimestre anterior y de 18.9% a tasa anual, la mayor de su historia, afectado por las medidas de confinamiento y cierre de actividades que se han implementado para desacelerar los contagios del COVID-19 y no saturar los servicios de salud.

Adicionalmente, la depreciación del peso frente al dólar también jugó en contra. En el primer semestre, el peso perdió 17.73%, afectado por la turbulencia financiera que provocó la pandemia de COVID-19.

De esta manera, los requerimientos externos dentro del SHRFSP aumentaron a 22.2% del PIB, desde 15.2% que representaban en 2019.

El gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador ha dicho que hará todo lo posible para no contraer nueva deuda, ya que a su parecer es una política que no ha dado resultados.

El SHRFSP ha venido al alza desde el gobierno de Felipe Calderón, particularmente desde 2008, cuando gran parte de la economía mundial fue afectada por la crisis hipotecaria que estalló en Estados Unidos.

Al cierre de 2008 el Saldo representaba 32.7% del PIB y se aceleró a 36.0% en 2012, algo que continúo en el gobierno de Enrique Peña Nieto. En 2013 la deuda total representaba 38.4% del PIB, y pasó a 43.4% al cierre de 2018.

El subsecretario de Hacienda, Gabriel Yorio, dijo el jueves en conferencia de prensa, que guardarán la carta del endeudamiento por si es necesaria para el segundo semestre del año, en caso de que un rebrote de coronavirus obligue al cierre de actividades.

Mientras tanto, el costo financiero del gobierno federal, es decir, el costo del servicio de la deuda, ascendió a 252,542 millones de pesos en el primer semestre, frente a 241,371 millones del mismo lapso de 2019.

La cifra de este año comprende erogaciones por 218,050 millones de pesos para el pago de intereses y gastos asociados a la deuda interna, la cual incluye un monto de 6,602 millones de pesos para el pago anticipado de intereses derivados del intercambio de deuda a través de las operaciones de permuta de deuda; así como, un gasto por 2,206 millones de dólares para cubrir el pago por concepto de intereses, comisiones y gastos asociados a la deuda externa.

En este escenario, algunas corredurías como JP Morgan, no descartan que el SHRFSP llegue a 60% del PIB al cierre del año.