Si bien el desempleo en la economía mexicana alcanzó nuevamente mínimos históricos en el primer trimestre del año en curso, la informalidad laboral registró una tendencia alcista.
De acuerdo con datos desestacionalizados del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), la tasa de desocupación en México llegó a 2.74% de la población económicamente activa (PEA) en los primeros tres meses del 2023.
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Este nivel representó el menor indicador laboral desde que el INEGI tiene registro (2005) y ya van dos trimestres consecutivos presentando mínimos históricos.
Informalidad, al alza
Los mercados asocian el bajo desempleo con las nuevas inversiones extranjeras derivadas del efecto del nearshoring y con el autoempleo dentro del sector informal
De hecho, la tasa de informalidad laboral, que considera a los ocupados laboralmente vulnerables por la naturaleza informal de la unidad económica para la que trabaja o que su vínculo laboral no es reconocido por su fuente de trabajo, aumentó.
Al cierre del primer trimestre de este año, esta tasa se ubicó en 55.23% de los ocupados, superior al resultado de 55.16% que se mostró en el periodo previo.
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Crece la PEA
En términos generales, la PEA del país fue de 60.1 millones de personas, dos millones más que en el primer trimestre del 2022; dicho segmento representó el 60.2% de la población de 15 años y más.
Un total de 58.5 millones de personas se encontraban ocupadas: 2.4 millones de personas más con relación al mismo trimestre del 2022.
Este cambio se concentró, según información del INEGI, en el comercio, con un aumento de 566,000 personas; en la industria manufacturera, con 436,000, y en servicios diversos, con 341,000 personas.
En tanto, la población ocupada en los micronegocios creció en 730,000 personas, en los establecimientos pequeños, 412,000, y en los grandes, 372,000.
Por su parte, en el primer trimestre del 2023, la población subocupada, que son las personas que declararon tener necesidad y disponibilidad para trabajar más horas, fue de 4.3 millones y representó una tasa de 7.3 % de la población ocupada, porcentaje inferior al del primer trimestre del 2022 (9.0%).
