En 2019, la cuenta corriente de México registró un déficit de 2,400 millones de dólares, cifra menor al déficit de 23,000 millones del año previo, informó este martes Banco de México (Banxico). 

Durante el año pasado, el déficit de la cuenta corriente se ubicó en 0.2% del PIB, cifra inferior al 1.9% en 2018 y el menor déficit reportado desde 1987, año en que se registró un superávit de 2.3% del PIB. 

La cuenta corriente es un componente de la balanza de pagos en el que se registra el comercio de bienes y servicios y las transferencias unilaterales de un país con el exterior. 

Las transferencias unilaterales se refieren a regalías hechas por los particulares y el gobierno a los extranjeros, y a regalías recibidas de extranjeros,

según la definición de Banxico.

La principal razón de la caída fue una disminución de las importaciones no petroleras, en un contexto en el que la economía mexicana se contrajo 0.1% en 2019 por primera vez en una década, explicaron expertos. 

El dato (de cuenta corriente) es consistente con una economía que no crece. Cuando hay una contracción económica obviamente consumes menos importaciones,

dijo el economista en jefe para México del banco Natixis, Benito Berber. 

Banxico recordó que 2019 estuvo caracterizado por una elevada incertidumbre y desaceleración económica a nivel mundial, mientras que hacia el futuro los pronósticos de crecimiento continúan con revisiones a la baja, al tiempo que persisten riesgos de tensiones comerciales.

Adicionalmente, el reporte de Banxico mostró una caída de 16% en Inversión Extranjera Directa durante 2019. En total el país captó por este concepto 32,921 millones de dólares.

Con información de Reuters