Rodrigo A. Rosales

El gasto por parte de las familias mexicanas en bienes y servicios de consumo dibujó una tendencia ascendente durante noviembre del año pasado.

De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en el penúltimo mes del 2021, el Indicador Mensual del Consumo Privado en el Mercado Interior creció 0.71% a tasa mensual desestacionalizada, que significó el quinto aumento al hilo.

Dicha variación también representó trazar de una tendencia de aceleración, tras el impulso que dio el programa federal del Buen Fin al consumo privado.

El crecimiento de 0.71% en noviembre derivó del aumento de 0.25% en el apartado de bienes y servicios de origen nacional, donde sus dos subíndices aumentaron: bienes en 0.15% y servicios 0.70%.

Mientras el rubro de bienes importados incrementó 1.24%, el segundo crecimiento consecutivo; aunque fue menor al dato de octubre, de 1.48%, situación explicada por las disrupciones en la proveeduría de bienes.

El IMCPMI mide el comportamiento del gasto realizado por los hogares residentes del país en bienes y servicios de consumo, tanto de origen nacional como importado; quedan excluidas las compras de viviendas u objetos valiosos.

Inflación influye en dinamismo del consumo 

Este indicador permite dar seguimiento de forma mensual al componente más significativo del Producto Interno Bruto (PIB) por el lado de la demanda, representando 64.9% del total de la economía mexicana.

La inflación es un factor en la dinámica del consumo privado del país, impactando de forma negativa en el poder adquisitivo de las familias mexicanas. 

Los precios al consumidor incrementaron 7.36% en noviembre del 2021, variación fuera del objetivo del Banco de México (3% +/- 1 punto porcentual).