El sector de la construcción retrocedió durante marzo pasado, señal del deterioro que vive la inversión en México.
De acuerdo con datos desestacionalizados del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el valor de la construcción ascendió a 25,186 millones de pesos en el tercer mes del 2023.
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Este monto significó una caída de 1.08% respecto a febrero previo, mientras que en el primer trimestre del año la industria de la construcción promedio una contracción de 1.89%.
Destacó una contracción mensual de 0.12% en la edificación, sector que representa aproximadamente un 40% del valor total de la producción en el sector constructor. Con el dato de marzo, el sector acumula dos meses consecutivos de caída, lo que es consistente con un deterioro de la inversión
reporta Grupo Financiero Base.
El retroceso de la industria de la construcción también se explica por las contracciones en electricidad y telecomunicaciones (-3.27%), que disminuyó después de registrar alzas al hilo durante tres meses, y en agua, riego y saneamiento (-1.61%), que cayó tras cinco meses consecutivos de crecimiento.
Nivel prepandemia
Al comparar el valor de la producción de marzo del 2023 con el registrado en febrero del 2020, previo al inicio de la pandemia de COVID-19, se observa una contracción de 6.77%.
Sin embargo, Banco Base aprecia cómo el deterioro inició antes de la pandemia. Comparando el nivel actual del indicador de valor total de la producción con el máximo histórico que se registró en enero del 2008, se observa que existe una baja de 33.40%.
Al interior, el mayor rezago se da en el sector de electricidad y telecomunicaciones, que se ubica 68.35% por debajo del máximo de diciembre del 2018.
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Efecto nearshoring
Si bien el sector de la construcción vive un momento desalentador, se espera que con el nearshoring esta industria detone.
Según cifras de la Secretaría de Economía, en el primer trimestre del 2023 entraron al país 18,636 millones de dólares de Inversión Extranjera Directa (IED).
Al restar los flujos extraordinarios de la fusión de Televisa y Univisión y la reestructura de Aeroméxico que se registraron en el primer trimestre del 2022, resulta un alza anual de 48.5%, el mayor crecimiento para un periodo igual desde 2010.
Si se omiten los flujos extraordinarios del 2022, los flujos de IED muestran un crecimiento del 17.2%. Lo anterior es positivo y refleja el efecto del nearshoring, ante una relocalización de la industria
asegura Banco Base.
