La confianza de los consumidores estadounidenses cayó durante agosto a su nivel más bajo en 10 años debido al avance de la variante Delta de coronavirus y a los temores sobre la inflación.
De acuerdo con la estimación final de la Universidad de Michigan, el índice se ubicó en 70.3 puntos, similar a la estimación preliminar de 70.2 unidades y por debajo del 70.7 esperado por analistas. Se trata del nivel más bajo desde diciembre de 2011.
Por otra parte, los ingresos personales registraron un aumento durante el mes de julio, acelerando 1.1%, muy por delante de 0.3% estimado por Dow Jones.
Del mismo modo, el gasto de los consumidores aumentó 0.3%, en línea con las expectativas de los mercados.
