El Banco Central Europeo (BCE) elevó la tasa de interés en 50 puntos base, su mayor aumento desde 2011, o el doble de lo que había indicado después de su reunión anterior, en un esfuerzo por frenar la inflación récord en la eurozona.

Dicho aumento confirma que las preocupaciones sobre los precios altos ahora superan las consideraciones de crecimiento, incluso cuando la economía de la eurozona se tambalea por el impacto de la invasión de Rusia en Ucrania.

Además, el BCE también aumentó su tasa principal de refinanciamiento al 0.50% y prometió nuevas alzas de tasas tan pronto, lo cual sería en su próxima reunión del 8 de septiembre.

Será apropiada una mayor normalización de las tasas de interés. La distribución anticipada de la salida de las tasas de interés negativas permite al Consejo de Gobierno hacer una transición a un enfoque de reunión para las decisiones sobre tasas de interés

dijo el BCE en un comunicado.

El BCE guió durante semanas a los mercados para que esperaran un aumento de 25 puntos base, pero fuentes cercanas a la discusión dijeron que se pusieron en juego 50 puntos base poco antes de la reunión, ya que los indicadores apuntaban a un mayor deterioro de las perspectivas de inflación.

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Inflación, cerca del territorio de los dos dígitos

Dado que la inflación ya se acerca al territorio de los dos dígitos, ahora corre el riesgo de afianzarse por encima del objetivo del 2% del BCE; además es probable que cualquier escasez de gasolina durante el próximo invierno haga subir aún más los precios, perpetuando su rápido crecimiento.

Los economistas encuestados por Reuters pronosticaron un aumento de 25 puntos base, pero la mayoría dijo que el banco en realidad debería subir 50 puntos base, elevando su tasa de depósito mínima histórica de menos 0.5% a cero.

Ante las expectativas de las subidas de tasas, el euro, que cayó a un mínimo de dos décadas frente al dólar a principios de este mes, se reafirmó alrededor de medio punto porcentual por la decisión del BCE.

Programa para mantener control en los costos de financiación

El BCE dio a conocer un nuevo programa de compra de bonos para mantener bajo control los costos de endeudamiento de los países de la eurozona con más adeudos.

Ante este escenario, el BCE presentó una nueva herramienta, el Instrumento de Protección de la Transmisión (TPI), destinado a limitar el aumento de sus costos de endeudamiento y limitar la fragmentación financiera.

La escala de las compras de TPI depende de la gravedad de los riesgos que enfrenta la transmisión de políticas. El TPI garantizará que la orientación de la política monetaria se transmita sin problemas a todos los países de la eurozona

compartió el BCE.

A medida que aumentan las tasas del BCE, los costos de endeudamiento aumentan desproporcionadamente para países como Italia, España o Portugal, ya que los inversionistas exigen una prima mayor para mantener su deuda.

El compromiso del BCE de este jueves se produce cuando una crisis política en Italia ya está afectando a los mercados tras la dimisión del primer ministro Mario Draghi.

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