Las exportaciones de México acumularon cinco meses con contracciones y retrocedieron 12.8% anual en junio, de acuerdo con el dato oportuno de la balanza comercial publicado este lunes por el Inegi.
Los envíos de mercancías del país no tenían una racha de caídas tan prolongada desde febrero de 2015 a agosto de 2016, según los datos desestacionalizados del instituto.
Las importaciones registraron una caída de 22.2% e hilaron 14 meses en terreno negativo, para anotar su peor racha desde 1994.
El total de las exportaciones fue de 33,076 millones de dólares y el de las importaciones de 27,530 millones de dólares, por lo que el saldo de la balanza comercial fue superavitario en 5,547 millones de dólares, que se compara con el superávit de 2,541 millones de dólares obtenido en junio de 2019.
El superávit histórico de junio “fue resultado de una mayor recuperación de la demanda externa sobre la interna tras la apertura parcial de la economía local”, explicó Gabriela Siller, directora de Análisis Económico-Financiero de Banco BASE en una nota.
Las exportaciones no petroleras se redujeron 11.6%, a 31,818.5 millones de dólares, y las petroleras cayeron 35.6%, a 1,258 millones de dólares.
“Al interior de las exportaciones no petroleras, las dirigidas a Estados Unidos retrocedieron a una tasa anual de 7.9% y las canalizadas al resto del mundo lo hicieron en 28 por ciento”, informó el Instituto.
Mientras que las importaciones cayeron por los descensos de 18.2% en las importaciones no petroleras, a 25,822.6 millones de dólares, y de 55.4% en las petroleras, a 1,707.2 millones de dólares.
“Al considerar las importaciones por tipo de bien, se observaron caídas anuales de 43.6% en las importaciones de bienes de consumo, de 19.6% en las de bienes de uso intermedio y de 12.3% en las de bienes de capital”, publicó Inegi.
Comercio se recupera respecto a mayo
Con cifras desestacionalizadas, el comercio de México registró una recuperación respecto a las pronunciadas caídas de mayo.
En junio, mes en que México expandió la lista de actividades económicas esenciales que podían retomar operaciones frenadas a causa de la pandemia, las exportaciones totales de mercancías reportaron un alza mensual de 75.57%, gracias a los aumentos de 76.93% en las exportaciones no petroleras y de 49.67% en las petroleras.
Al interior de las exportaciones no petroleras, las manufactureras avanzaron 83.57 por ciento mensual, por las alzas de 40.94% en las manufactureras no automotrices y, partiendo de una baja base de comparación, de 534.40% en las exportaciones automotrices, detalló Inegi.
La industria automotriz fue una de las que pudo reiniciar operaciones de manera paulatina a inicios de junio, después de casi tres meses de estar fuera de operaciones.
Mientras que las importaciones mostraron un incremento mensual de 22.24%, resultado de los crecimientos de 23.08% en las importaciones no petroleras y de 11.08% en las petroleras.
“Por tipo de bien, se presentaron avances mensuales de 5.89% en las importaciones de bienes de consumo, de 27.21% en las de bienes de uso intermedio y de 5.05% en las de bienes de capital.
Según Banco Base, persisten los riesgos a la baja del comercio debido al repunte en el número
de contagios en Estados Unidos a partir de junio, país destino de alrededor del 80% de las exportaciones totales.
“Asimismo, en México no se ha logrado controlar la pandemia, por lo que la reapertura económica es más gradual de lo esperado inicialmente, generando afectaciones en las cadenas de suministro ante limitaciones en la producción”, detalló Siller.
Punto y aparte: la entrada del T-MEC
Ante la reapertura paulatina de la economía, los datos sugieren que los descensos históricos en materia comercial tocaron fondo y hacia el segundo semestre se verá una menor caída y que la entrada del T-MEC puede revertir esa situación, de acuerdo con el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF).
Con el tratado comercial, el país puede aprovechar la oportunidad de atraer plantas industriales y de proveeduría para atender a las cadenas productivas de Norteamérica, generando condiciones para fortalecer y diversificar la economía del país, según el presidente IMEF, Ángel García-Lascuarín.
“El impulso a nuevas inversiones es fundamental para lograr una recuperación más expedita y robusta. La competencia entre los países por atraer nuevos recursos productivos es feroz y especialmente ahora que se necesita para apalancar las economías”, dijo en entrevista radiofónica García-Lascuarín.
A fin de atraer empresas a México, la secretaria de Economía, Graciela Márquez, dijo que han sostenido conversaciones con firmas asiáticas para capitalizar el T-MEC.