Pese a las condiciones globales adversas, la demanda externa mostró dinamismo en marzo pasado, incentivando las exportaciones mexicanas.
De acuerdo con datos desestacionalizados, la balanza comercial de México ascendió a 81 millones de dólares durante el tercer mes del 2023.
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Dicho monto superavitario, que se dio tras tres meses al hilo con déficit, fue la diferencia entre los 49,404 millones de dólares de exportaciones y los 49,323 millones de importaciones.
Aumentan las ventas al exterior
En las ventas al exterior, la tasa de crecimiento fue de 4.50% mensual, aunque le precedió una caída de 5.69% en enero, es decir, se dio un efecto rebote.
Este ajuste estadístico también se refleja en los resultados del Producto Interno Bruto (PIB) de Estados Unidos, ya que la primera estimación arrojó un aumento anualizado de 1.1% en los primeros tres meses del año en curso.
Esta variación fue menor al alza de 2.6% en el último trimestre del 2022; cabe recordar que la tendencia de desaceleración de la economía estadounidense tiene un impacto directo en las exportaciones mexicanas.
En tanto, las importaciones se contrajeron 2.10% en marzo pasado, siendo la segunda disminución consecutiva. Lo anterior manifiesta debilidad en la demanda doméstica.
