El aguacate, uno de los frutos preferidos de las familias mexicanas, está costando cada vez más, debido a una menor producción nacional y una mayor demanda de Estados Unidos.
Durante los primeros cinco meses del 2022, la inflación acumulada del aguacate, además de alcanzar máximos de 23 años, registró el mayor nivel de todos los bienes y servicios considerados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
El Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) del aguacate ascendió a 87.20% en el periodo enero-mayo del año en curso, siendo el producto con la mayor variación en sus precios.
De hecho, al segundo lugar, fue el chayote, al cual le sacó casi el doble, al obtener una tasa de 47.60%.
El aguacate vive un aumento en sus precios en los primeros cinco meses por efecto estacionario en su ciclo agrícola, es decir, que se repite cada año.
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Aunque en la inflación de los primeros cinco meses del 2022 fue la mayor, para un mismo lapso de comparación, desde 1999, cuando se ubicó en 136.13%.
Aumentos de más de 100% en centrales de abasto
En la Central de Abasto de Iztapalapa en la Ciudad de México, el precio mayorista frecuente del aguacate fue de 47 pesos el kilo en el primer día del 2022, llegando a 111 pesos al cierre de mayo pasado, es decir, un alza de 138%.
Mientras en el Mercado de Abasto de “Estrella” de San Nicolás de los Garza en Nuevo León, el precio pasó de 56 a 117 pesos el kilo en el periodo de análisis, un incremento de 110%, reporta el Sistema Nacional de Información e Integración de Mercados (SNIIM).
En tanto, en el Mercado de Abasto de Guadalajara en Jalisco el precio del aguacate en los primeros cinco meses del año ascendió de 46 a 99 pesos el kilo, un crecimiento de 117%.
Se observa que en las centrales de abastos de las ciudades más importantes de México, las variaciones de los precios del fruto superaron el 100%, afectando el bolsillo de las familias.
Menor oferta y mayor demanda
Diferentes motivos se conjugaron para que la inflación de uno de los frutos predilectos del país alcanzara elevados niveles.
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Uno de ellos fue la combinación de una menor oferta y una mayor demanda, particularmente de exportación.
A mayo pasado, la producción de aguacate de Michoacán, que concentra más de 80% del total nacional, llegó a 827,656 toneladas, 1.8% menos que en igual lapso, según registros del Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP).
Michoacán es la única entidad de México que tiene certificaciones fitosanitarias para exportar aguacates a la Unión Americana, país donde más del 90% de su importación del fruto proviene del territorio nacional.
En Estados Unidos es promovido y consumido en eventos con alcance internacional, como es el Super Bowl
explica la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural.
El INEGI detalla que las exportaciones mexicanas de aguacate sumaron 1,262 millones de dólares en el primer cuatrimestre del año, monto que significó una cifra histórica al ser la más elevada para un mismo lapso, como consecuencia de una mayor demanda externa.
A este panorama se añade que la invasión rusa en Ucrania incrementó los precios internacionales de los fertilizantes, afectando el ciclo productivo del sector agrícola por la generación de mayores costos.
