A 24 años de que se hiciera la primera reforma en pensiones más importante del país, las Administradoras de fondos para el retiro (Afores) llegan al borde de un precipicio con una reforma que las salvó de un estallido social como el que se vivió en Chile y que permitirá que alrededor de 40,000 personas tengan acceso, por lo menos, a la pensión mínima garantizada.

Pese a las advertencias que se hicieron sobre las bajas pensiones que darían las afores a millones de trabajadores, los gobiernos fueron eludiendo el problema. Y en medio de una de las peores crisis sanitarias y económicas que enfrentó el país, se aprobó de último momento una reforma a los sistemas de capitalización individual. 

Los cambios fueron estructurales y aparentemente más realistas a la situación laboral de los mexicanos, pues la ley pasada que entró en vigor el 1 de julio de 1997 aspiraba a un entorno en que los trabajadores recibirían una pensión mayor del 70% de su último salario, si registraban 24 años en la formalidad laboral, estabilidad salarial y 65 años de edad.

Sin embargo, las expectativas no se cumplieron, pues la mayoría de los que cotizaron con afore, no alcanzó el número de semanas cotizadas (1,250), no contó con estabilidad salarial ni tampoco ahorró; solo pudo cumplir la edad de retiro y la pensión representaba menos del 30% de su último salario, según cálculos actuariales. 

 

No existía ningún trabajador que cumpliera con las 1,250 semanas, entonces, eso hubiera llevado a una gran decepción del sistema de cuentas individuales y hubiera dado lugar a lo que está pasando en Chile y Perú con propuestas de crear afores públicas, que no cobran comisiones o de expropiar las cuentas de los trabajadores o de regresar a un sistema de reparto

 dijo en entrevista el presidente de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar), Abraham Vela. 

 

De acuerdo con un documento de la Consar, de los 42 millones de cuentas identificadas como generación afore-IMSS, sin la reforma aprobada en diciembre del 2020, el 76% de los trabajadores no cumplirían con el número mínimo de semanas de cotización, con lo que tendrían una negativa de pensión.

En tanto, el 24% restante sí iba a recibir una pensión. De este porcentaje, el 17% tendrían acceso a la pensión mínima y, por otra parte, 7% del total de trabajadores podía aspirar a una pensión superior a la pensión mínima garantizada por tener ahorros superiores a 700,000 pesos.

 

Crisis en Chile apuró reforma en pensiones 

La crisis social que estalló en Chile por las bajas pensiones que estaban recibiendo los trabajadores de las AFP -símil de las afores-  orilló al gobierno mexicano a tomar cartas sobre el asunto y propuso una reforma para evitar una situación como la del país andino. 

La reforma consistió en reducir las semanas de cotización de 1,250 a 750 (solo en 2021 y se irán aumentando cada año hasta llegar a 1,000); las aportaciones suben de 6.5% a 15% a partir de 2023 y en un periodo de ocho años; y la más importante se eleva la pensión mínima garantizada.

 

 

Una manera muy coloquial de decirlo sería que esta bomba que estaba  haciendo tic tac y que iba a estallar este año, se logró desactivar gracias a la reforma

 expresó el presidente de la Consar.

 

Consar calcula que a 24 años de las afores,  existen entre 20,000 y 40,000 personas que iban a tener negativa de pensión y que por la reforma no la van a tener ·y la gran mayoría de ellos tendrán una pensión mínima garantizada.

 

Pensión mínima se complementará con la universal

Vela comentó que el 99.9% de los que ya no tienen negativa de pensión, alrededor de 40,000 personas, están recibiendo la pensión mínima garantizada, la cual es mayor a lo que hubieran obtenido sin la reforma que se aprobó en diciembre del 2020. 

 

Sin la reforma, la pensión mínima sería de 1,392 pesos. Ahora, el promedio es de 4,400 pesos al mes; unos están recibiendo hasta 8,000 pesos. Hay personas que están recibiendo menos dinero porque también lo están haciendo con 750 semanas de cotización y reciben alrededor de 2,500 pesos

 

Además, comentó que a esta pensión mínima deben sumarse los recursos que se están entregando bimestrales a las personas de 65 años y más del programa Pensión para Adultos Mayores. 

Pensión para adultos mayores aumenta a 3,100 pesos a partir de bimestre julio-agosto

Para Vela, la reforma que se aprobó en  diciembre del 2020 es la mejor que se ha hecho en materia de seguridad social y confía en que los cambios estructurales abonen no solo a mejorar la pensión de los trabajadores, sino al ahorro interno del país.