La actividad industrial de México siguió acelerando durante abril del presente año como consecuencia de que todos sus sectores registraron crecimientos en sus niveles de producción.

De acuerdo con datos desestacionalizados del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), la actividad industrial del país creció 2.9% anual durante abril del 2022, lo que significó el mejor resultado en los últimos tres meses.

Dentro de las actividades secundarias, la minería pudo librar los efectos del alza de los precios internacionales del crudo que deriva de la invasión rusa en Ucrania.

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Mientras la construcción continuó con su proceso de recuperación, pese a ser uno de los sectores más afectados no solo por la pandemia de COVID-19, sino desde años atrás por el recorte presupuestal a obra pública.

El conjunto de industrias manufactureras se mantuvo como el motor industrial del territorio nacional.

Minería sortea efectos colaterales

Después de dos meses con caídas, la producción minera aumentó 0.1% anual, gracias a los incrementos en minería no petrolera (2.4%) y servicios relacionados al sector (25.6%).

Estos ascensos compensaron la disminución de 3.3% de la extracción de petróleo y gas, la tercera al hilo. Este subsector sufre las subidas en los precios internacionales del crudo por el conflicto bélico.

Cabe recordar que los precios al productor en extracción petróleo crudo crecieron 65.40% anual en mayo pasado, con lo que llevan tres meses consecutivos superando variaciones de 60%.

Fortaleza eléctrica

En tanto, el sector de generación, transmisión y distribución de energía eléctrica, suministro de agua y de gas por ductos al consumidor final aumentó 3.2% en abril.

Esta variación anual significó conseguir el mayor nivel en los últimos nueve meses.

La fortaleza de este sector provino del rubro de energía eléctrica, cuya tasa de 3.7% fue la mejor desde julio del 2021 (4.2%).

Construcción, al alza

Por su parte, la construcción incrementó 2.1% en el cuarto mes del 2022, la mayor alza en los últimos cuatro meses.

Este sector tuvo distintos obstáculos. Antes de la pandemia la inversión pública se recortó, mientras tras el periodo más duro de la contingencia sanitaria su proceso de recuperación fue lento.

Sin embargo, los grandes proyectos federales, como el Tren Maya, la refinería de Dos Bocas, el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles o el Corredor del Istmo de Tehuantepec ya se ven reflejados en el sector de la construcción.

Motor industrial

El principal sector industrial, la manufactura, siguió mostrando fuerza en su producción. En abril creció 4.5%, hilando cuatro meses con variaciones superiores a 3%.

Su pilar, la fabricación de equipo de transporte, aumentó 1.2% anual, tasa con la cual presentó cuatro meses consecutivos con variaciones positivas, dejando de lado, por el momento, el impacto del déficit mundial de semiconductores del año pasado.

Los dos únicos subsectores manufactureras con disminuciones fueron industria de la madera (3.1%) y fabricación de productos textiles, excepto prendas de vestir (3.7%).