Díaz de León y su futuro
Nos cuentan que ya está prácticamente todo empacado en la oficina de Alejandro Díaz de León e incluso los cuadros que él mismo eligió para adornar su despacho, como lo marca la tradición en el banco central, ya están camino a una nueva bodega que se acondicionó para sustituir la que ahora forma parte del Museo Banco de México.
La pregunta obligada desde hace meses es cuál es el futuro del todavía Gobernador de Banxico que comenzó sus funciones como cabeza del banco central en diciembre de 2017, y la opción más directa y viable, aunque no la que más le emociona, es retomar la academia que fugazmente ya había impartido en su alma mater, el ITAM, específicamente en la Maestría en Administración y Finanzas.
Y es que con las cartas credenciales, experiencia y reconocimientos internacionales cualquier universidad o instituto le abriría las puertas de inmediato, pero Alejandro Díaz de León estaría buscando otros derroteros, como incorporarse como consejero en alguna empresa pública o privada, de las que incluso ya habría recibido invitaciones que aún no responde porque primero se tomaría unas merecidas vacaciones.
Pero además Díaz de León podría tener entre sus múltiples opciones incorporarse como economista en jefe en un destacado banco de inversión internacional o nacional, lo que podría hacer, sin ninguna limitación, después de un año de su salida.
Y es que el tránsito de Banxico a empresa financiera privada ha sido muy socorrido, con ejemplos destacados como algunos de los economistas más influyentes en México como Alonso Cervera de Credit Suisse; Carlos Capistrán de Bank of America; Gabriel Casillas, que ahora despacha en Barclays; Alexis Milo, economista independiente; y Guillermo Aboumrad de Santander.
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Así el abanico para Díaz de León es muy amplio y ahora con una agenda más ligera tendrá el tiempo suficiente para decidir su futuro laboral que por más que lo pretenda no estaría fuera de los reflectores mediáticos.
Todo lo contrario con los ex funcionarios del gobierno actual que gracias a la Ley Federal de Austeridad Republicana, están literalmente vetados por 10 años de una empresa privada donde por su experiencia podrían encontrar diversas ofertas como es el caso de Arturo Herrera, ex secretario de Hacienda y que al final no asumió en el Banco de México, además está Santiago Nieto Castillo, exjefe de la Unidad Inteligencia Financiera (UIF), y los expresidentes de la CNBV, Juan Pablo Graf, y de la Consar, Abraham Vela, quienes no tienen más camino que tocar las puertas de la academia.