El turismo fue uno de los sectores más golpeados por la pandemia, debido a las restricciones impuestas para reducir los contagios durante el 2020. Un ejemplo es Grupo Hotelero Santa Fe que reportó una caída del 52.2% en los ingresos de todo 2020, en comparación con las cifras del 2019.

En el mismo sentido, la caída de ingresos en el cuarto trimestre fue de 48.9%, mientras que la pérdida operativa llegó a 71.4 millones de pesos, según su información financiera.

Pese a esto, al cierre de 2020 se observó una ligera recuperación en comparación con otros trimestres del año.

“Durante el trimestre, todas nuestras propiedades permanecieron en funcionamiento, por lo que tuvimos tres meses completos de operación, aunque en la mayoría de nuestros hoteles se impusieron límites de ocupación debido a disposiciones gubernamentales” dijo a inversionistas Francisco Zinser, vicepresidente ejecutivo de la empresa.

Al cierre del trimestre, la ocupación fue de 35.5%, es decir una variación negativa de 27.7%. En comparación con los 12 meses terminados, la diferencia fue de -31.5%. Mientras que el RevPAR se redujo un 51.7%, debido en parte por la desocupación.

“Quiero reiterar que seguiremos enfocados en conducirnos prudentemente ante el entorno sin precedentes propiciado por la pandemia, esto es: i) vigilar la plena implementación de las medidas de seguridad e higiene contra el COVID-19 en todas nuestras propiedades, ii) mantener un estricto control de gastos en pro de la presentación de los niveles de liquidez, y iii) continuar la búsqueda de oportunidades operativas y financieras que nos permitan asegurar la sostenibilidad de nuestro negocio a largo plazo”, dijo el directivo.

Entre las nuevas oportunidades que han buscado se encuentra un aumento de capital aprobado por la Asamblea General Ordinaria de Accionistas, con lo que incrementaron a 616,084,530 las acciones ordinarias.

Además cerraron un acuerdo para operar el recién inaugurado SLS Cancún, una propiedad de lujo ubicada en Puerto Cancún.

El hotel fue diseñado por el afamado diseñador Piero Lissoni y fue desarrollado por Related Group, Inmobilia y U-Cali. Cuenta con 45 suites de lujo, 130 unidades residenciales, Restaurante Leynia, Ciel Spa y un gimnasio de última generación.

El hotel está ubicado en un complejo residencial que cuenta con 250 metros de playa, un club de playa, un club de veleros, un campo de golf de 18 hoyos diseñado por Tom Weiskopf y un centro comercial con más de 100 tiendas y boutiques de alta gama, así como de 16 salas de cine.