En los últimos años, la zona de Polanco en la alcaldía Miguel Hidalgo se consolidó como uno de los mercados inmobiliarios más rentables de la ciudad de México, año con año la zona llegó a incrementar hasta 25% su plusvalía.

En 2018 alcanzó máximos históricos; una casa o departamento a la venta podía costar más de 94,000 pesos por metro cuadrado y una renta podía ser mayor a 50,000 pesos mensuales. Pero como dice el refrán, nada es para siempre y ahora la colonia ve disminuir su brillo.

En alguno casos los precios ya no están subiendo y en otros incluso se están ajustando a la baja. De acuerdo con el portal de bienes raíces Propiedades.com, la plusvalía de Polanco disminuyó 5.2% hasta diciembre de 2018.

“El segmento Nuevo reportó también una baja de 4.1% y el segmento Usado (que corresponde a oferta de departamentos de más de cuatro años de antigüedad) disminuyó 8.2%” comentó Leonardo Gonzáles, analista de Real Estate en Propiedades.com.

Se debe a múltiples factores, el primero de ellos es una baja en la demanda. De acuerdo con el especialista, para vivir en alguna de la cinco secciones de Polanco es necesario percibir ingresos de al menos 400,000 pesos, lo cual reduce el mercado potencial.

“Así en los inmuebles de mayor valor se está observando un desplazamiento más lento, ya que la demanda de este nicho es mucho más específica”. De acuerdo con Gonzáles, el tiempo promedio que un inmueble se encuentra ofertado es de 254 días.

Considera también que la vivienda en renta rivaliza con la venta de propiedades.

“La mejor decisión en la zona hoy es alquilar, aunque también es recomendable adquirir departamentos usados. Vemos que el mercado de renta está canibalizando al de compra-venta, lo cual explica el que la plusvalía muestre este nivel de ralentización y decrementos”, explica Leonardo González.

“Podemos considerar que la zona tiene un grado de saturación alcanzando un estado estacionario en su ciclo inmobiliario de largo plazo”.

El especialista destaca que aún no es preciso hablar de sobre oferta en el segmento residencial, sin embargo las propiedades que se encuentran en desarrollo y que sean entregadas durante la segunda mitad del año también impactarán.

De tal manera que si siguen sin colocarse las existentes y se adicionan las nuevas, entonces sí se podría hablar de una sobre oferta.

“Aunque los decrementos son aún marginales podrían ser un signo de preocupación durante el siguiente semestre, debido a que la expectativas de ganancias en el mediano plazo podrían reducirse de manera considerable”, precisó.

Oficinas estables

En el segmento de espacios corporativos, el panorama es más alegre. Este ha disminuido la tasa de vacancia y los metros cuadrados disponibles, aunque a lo largo de 2018 disminuyó el precio de salida.

Lo que mantiene la actividad, pese a caída en el precio es la falta de terrenos disponibles, opina Fernanda Trillo, vicepresidenta ejecutiva en Coldwell Banker Commercial.

“La razón es que no hay muchos terrenos. Difícilmente encuentras un proyecto de oficinas en venta, además la mayoría de los que existen pertenecen a fondos, desarrolladores privados o FIBRAS. Así lo que se construye sale muy rápido por que la zona es muy codiciada”.