El mercado de vivienda nueva de segmento residencial en España está atravesando una recuperación y ese nuevo inventario puede ser colocado entre inversionistas españoles así como extranjeros, principalmente latinos, entre los que destacan los mexicanos.

El precio de la vivienda en España se está apreciando en promedio 3% de manera anual, tendencia que se mantendrá en el 2020 y durante los próximos tres años, considera Knight Frank, firma inmobiliaria originada en Londres con presencia global, lo cual puede ser una oportunidad para los inversionistas que buscan comprar propiedades y obtener rendimientos en el futuro.

Pese a los incrementos, el precio de las viviendas sigue siendo competitivo en relación con otras ciudades europeas, pues por ejemplo con un millón de euros es posible adquirir 109 metros cuadrados en vivienda de lujo en Madrid, mientras que por la misma cantidad se pueden adquirir 71 metros en Roma, 45 metros en Viena o 31 en Londres, según las estimaciones de la firma.

Lo anterior se combina con un mayor desarrollo de vivienda de lujo que atrae a compradores latinos, principalmente mexicanos, comentan Carlos Zamora y Javier Velduque, directivos de la firma.

De acuerdo con sus estimaciones, 35% de las viviendas nuevas de segmento plus que comercializan se coloca entre el mercado latino. Los mexicanos absorben 40% de esas viviendas, seguidos por venezolanos, colombianos y argentinos.

“Hay una evolución de la obra nueva y se ha promovido con mayor presencia de amenidades, algo que en España no se acostumbraba tanto”, comentó Javier Velduque, consultor residencial de lujo en Knight Frank.

También considera que el tipo de proyectos que se están desarrollando podrían competir con los mercados de lujo de otros países como Miami, lo cual aunado al idioma común, conectividad internacional y beneficios fiscales están incrementando el interés de esos inversionistas.

Entre los beneficios fiscales se encuentra un modelo similar a la visa EB-5 de Estados Unidos, que permite que a las personas que realizan una inversión inmobiliaria se les otorguen documentos de residencia o ciudadanía.

En el caso de España, la inversión mínima es de 500,000 euros (poco más de 10 millones 200,000 pesos), con lo cual el solicitante recibe el derecho de circular libremente por el área Schengen, que está conformada por 26 naciones europeas que “reconocieron la abolición de sus fronteras interiores con otras naciones miembros y fuera de ellas para la libre circulación y sin restricciones de personas, bienes, servicios y capital”, indica la información oficial.

El visado se renueva cada dos años. Cinco años después de la inversión se puede conseguir la residencia permanente y, tras 10 años, la ciudadanía. El programa ha tenido éxito, pues se estima que entre 2013 y 2017 como parte de esta iniciativa se adquirieron 490 propiedades en Madrid.