La construcción de caminos rurales se contempla como uno de los proyectos prioritarios del gobierno federal, al considerarse como una estrategia para incrementar empleo y reactivar la industria, aunque a diferencia de otros proyectos sí percibieron una disminución para 2021.

De acuerdo con el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación, la construcción de caminos rurales tendrá 6,792.8 millones de pesos para la construcción de 210 kilómetros, una reducción de 1,442.2 millones de pesos en comparación con el PPEF de 2020.

En los proyectos de inversión se encuentran el camino Los Herrera-Tamazula en Durango, la terminación de la carretera Badiraguato Parral en Sinaloa, y la construcción del camino rural San Ignacio- Tayoltita entre Durango y Sinaloa.

Además se prevé la construcción de 68.0 kilómetros en la red federal carretera, así como conservación y reconstrucción de 1,180 kilómetros y la realización de estudios técnicos para 2,200 kilómetros.

Durante 2020 el presupuesto fue mayor, también en la construcción de carreteras, los objetivos eran la modernización de 146.8 kilómetros de la red federal, la liberación del derecho de vía en 100 kilómetros, así como la construcción y modernización de 20 kilómetros de caminos rurales, conservación y reconstrucción de 4,390 kilómetros y la realización estudios técnicos en 1,800 kilómetros.

En el caso de la conservación carretera se previeron para el año actual la reconstrucción de 73 puentes y 32 puntos de conflicto, la conservación periódica de 2,612 kilómetros y la conservación rutinaria en 40,590 kilómetros, conservación rutinaria de puentes en 6,168 piezas, por último, y atender 10 Proyectos de Asociación Pública Privada APP que sumarían 1,755 kilómetros en tramos carreteros. Sin embargo, el cumplimiento de esa meta se encuentra lejano.

De acuerdo con el análisis de la Cámara Nacional de la industria de la construcción, el el programa de pavimentación de caminos tenía hasta el mes de julio un avance financiero de 0.30% con tres contratos de ocho.

En un contexto en el que la industria de la construcción considerada actividad esencial y generadora de alrededor de seis millones de empleos se ha visto afectada por la pandemia, así como por una dinámica de menor actividad desde años anteriores.

En julio la industria tuvo una reducción de 23.7% anual, con los que cumplió 24 meses consecutivos con retrocesos, de acuerdo con los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía.

La Secretaría de Hacienda considera que la industria va en camino a reactivarse pues de acuerdo con el Instituto Mexicano del Seguro Social se recuperaron 126,092 empleos en la construcción, durante el bimestre junio-julio.