El 15.26% de los municipios de México tienen una vulnerabilidad alta de contagio de coronavirus por una infraestructura de vivienda precaria, de acuerdo al Índice de Vulnerabilidad en infraestructura de la Vivienda ante COVID-19 (IVIV-COVID), desarrollado por el Centro Cemex-Tec.
En tanto, el 13.3% de los municipios analizados no son vulnerables; el 25.1% poseen una baja vulnerabilidad; el 44.6% una media, y el 1.6% cuentan con una muy alta vulnerabilidad.
Las personas que habitan en viviendas precarias, con pisos de tierra, muros y techos de materiales endebles o de deshecho y que además se sitúan en lugares demográficamente densos, con poco o casi nulo acceso a servicios básicos como agua potable y drenaje, tienen un mayor riesgo de contagio comunitario frente al COVID-19 ya que tienen limitado espectro de acción de seguir las recomendaciones de la OMS,
dijo Carmen Armenta Menchaca, quien lidera el área de vivienda del Centro Cemex-Tec.
En cifras poblacionales los no vulnerables representan al 13%; los de vulnerabilidad alta es el 18.3%, y los de muy alta son el 1.8%, detalla el informe que tomó a 2,444 municipios del país, de acuerdo al estudio.
El índice mapea y presenta información sobre la vulnerabilidad de las viviendas en el país, generalmente establecidas en un contexto de informalidad y que pueden representar un riesgo de mayor contagio del virus COVID-19 para los habitantes.
El objetivo del estudio es ayudar a medir la debilidad de la vivienda mexicana frente al virus y puede ayudar a mejorar la toma de decisiones en materia de políticas públicas en cualquier nivel de gobierno, así como a la iniciativa privada y la sociedad civil.
Con respecto a los estados, Oaxaca es la entidad que cuenta con el mayor número de municipios en una situación de vulnerabilidad muy alta, seguidos por Puebla y Veracruz.
Por el contrario, Jalisco, Zacatecas y Chihuahua son quienes tienen la tasa menor de riesgo, de acuerdo al reporte.
En México, cerca de 14 millones de hogares no gozan del derecho a una vivienda digna y decorosa, lo que representa el 45% del total de viviendas registradas en el país, según el informe de Derecho a la Vivienda del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) de 2015.
