La venta masiva en Wall Street de acciones de Tesla, del multimillonario Elon Musk, se intensificó este lunes, y los títulos del fabricante de vehículos eléctricos cayeron más de 15%, con lo que registró su peor día en el mercado desde septiembre de 2020.
Este nuevo tropiezo se sumó al del viernes pasado, cuando Tesla cerró su séptima semana consecutiva de pérdidas, su racha más larga desde que debutó en el Nasdaq en 2010. Los papeles de la compañía han caído todas las semanas desde que Elon Musk fue a Washington, DC, para asumir su cargo dentro del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) de Estados Unidos.
En la jornada de este lunes, la emisora cerró el día con una caída de 15.43%, a 222.15 dólares por acción, de acuerdo con datos de Investing. Esto llevó al Nasdaq a desplomarse casi 4%, su caída más pronunciada desde 2022.
La caída de este lunes estuvo vinculada a la incertidumbre en torno a los planes del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sobre los aranceles en contra de Canadá y México, mercados clave para los proveedores de la industria automotriz, y la posible recesión económica que se desencadenaría por las afectaciones de las tarifas.
Acciones de Tesla pierden el 50% de su valor
Desde que alcanzaron un máximo de 479.86 dólares el 17 de diciembre, las acciones de Tesla han perdido más del 50% de su valor, lo que ha llevado a la compañía a eliminar más de 800,000 millones de dólares de capitalización de mercado.
Aunque podría considerarse que las afectaciones de los papeles de Tesla provienen de factores externos, también es cierto que la compañía está lidiando con la erosión de su imagen debido a la retórica política incendiaria de Musk y su extenso trabajo con la administración Trump.
Además, Musk ha utilizado su red social X para lanzar acusaciones contra jueces cuyas decisiones no le han agradado y ha promovido falsos puntos de vista del Kremlin sobre el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy.
Esto ha llevado a que las instalaciones de Tesla en todo Estados Unidos sean escenarios de protestas, y los vehículos y las instalaciones de Tesla han sido objeto de vandalismo e intentos de incendio.
Cuando los autos de la gente corren el riesgo de ser rayados o incendiados, incluso las personas que apoyan a Musk o son indiferentes a él podrían pensar dos veces antes de comprar un Tesla
advirtió Ben Kallo, analista de Baird.
Por su parte, analistas del Bank of America señalaron que las ventas de Tesla han caído 50% en Europa debido al creciente desagrado por la marca, y a que algunos clientes potenciales siguen esperando la nueva versión del Model Y.
Con información de CNBC
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