La industria automotriz mexicana podría sufrir paros en su producción ante la falta de suministros, aseguró el director general de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz, Fausto Cuevas.
Explicó que el paro de labores en las diferentes empresas se debe a una escasez de material, el cual ya había generado problemas desde el año pasado y que se agravó con la intervención rusa sobre Ucrania.
De acuerdo al reporte de venta de #VehículosHíbridos y eléctricos, el acumulado de enero a diciembre de 2021 fue de 47,079 unidades vendidas en el país. pic.twitter.com/zcN7inhZyY
— AMIA (@AmiaMexico) March 14, 2022
Estabilización en el abasto, no en 2022
El directivo de la AMIA señaló que es probable que haya nuevos paros técnicos, que dependerán de la disponibilidad de semiconductores o chips, ya que los paros han sido obligados por falta de componentes que requieren de estos dispositivos.
Ante este escenario, el directivo pronosticó que la industria automotriz verá una estabilización en el abasto de materiales hasta el 2023.
La respuesta es sí (habrá más paros). Si vemos desde que empezó esta crisis de semiconductores a finales del 2020 hasta ahora, ha ido mejorando, pero espero que esa tendencia se mantenga
comentó Cuevas.
Sin embargo, para el presidente ejecutivo de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), Guillermo Rosales Zárate, el sector automotriz mexicano recuperará los niveles de producción y ventas prepandémicos hasta el 2024.
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Sindicatos buscan frenar impacto
Tras los paros que han existido y que continuarán en la industria automotriz, los líderes de algunos sindicatos confirmaron a EL CEO que se encuentran trabajando para que dichas medidas no impacten en los salarios y puestos trabajadores.
El coordinador nacional de la Federación de Sindicatos Independientes de las Industrias Automotriz, Autopartes, Aeroespacial y del Neumático (FESIIAAAN), Juan Pablo Hernández Lara, dijo que algunas empresas del sector comenzaron a reducir su plantilla de trabajadores, a raíz del paro de labores.
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Es una situación complicada para todas las armadoras desde el año pasado, y no es secreto para nadie que la falta de semiconductores y desabasto estuvo generando algunos paros el año pasado, incluso este, aunque se espera que la economía mejore este año
comentó Lara.
En el caso de los trabajadores de la empresa alemana, Volkswagen, el sindicato entabló conversaciones con la propia compañía para implementar herramientas a fin de proteger los puestos de trabajo, dijo el secretario general del Sindicato Independiente de Volkswagen de México, Jose Juan Hernández.
Precisamente los paros técnicos se implementaron para succionar algunas situaciones, algunos momentos de crisis y hoy utilizamos esos mecanismos para proteger los puestos de trabajo bajo un acuerdo entre empresa y sindicato de que los compañeros que les toque descansar se van con 75% de su salario
explicó el secretario
Añadió que existen mecanismos para poder subsanar la crisis que viene con el tema de desabasto para que todos los trabajadores puedan conservar su puesto de trabajo.
Además, mencionó que con Volkswagen se ha planteado la eliminación de algunos turnos de trabajo, “pero nosotros no lo permitimos, ahorita no hay riesgo de pérdidas de puestos de trabajo”.
Respecto a General Motors (GM) en San Luis Potosí, que se encuentra bajo el contrato colectivo a cargo de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), los trabajadores que estuvieron sin trabajo varios meses, se les pagó el 50% de su salario. indicó Jose Juan Hernández.
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Comprar un auto no es prioridad
La elevada inflación que se vive en el país y los altos precios de la gasolina a nivel mundial, representan nuevos obstáculos para los mexicanos al momento de pensar si deben o pueden adquirir un automóvil a lo largo de este año.
Ante este panorama, algunos sectores de la población optan por darle prioridad a los productos de primera necesidad antes que la adquisición de un bien durable, como un automóvil.
El incremento en los precios de los combustibles afecta a los ciudadanos, así como el de los costos en los insumos para la industria, esto desencadena en altos precios de los autos y en incremento de la desconfianza del mexicano
consideró Humberto Calzada, economista en Jefe para Rankia LATAM.
Con información de Miguel Moscosa.
