Luego de que el fondo de cobertura Archegos Capital Management ejerció presión sobre el sector financiero tras verse obligada a liquidar activos por un valor de 30,000 millones de dólares, las calificadoras ajustaron sus perspectivas sobre Nomura y Credit Suisse, los bancos más afectados.
Este miércoles, Moody’s y Fitch Ratings recortaron su perspectiva sobre los bancos de estable a negativa, citando preocupaciones sobre la gestión de riesgo, mientras se enfrentan a pérdidas multimillonarias.
En su revisión, Moody’s señaló la voluntad de Nomura, el mayor banco de inversión de Japón, de asumir una gran exposición a los clientes sin compensar suficientemente el riesgo. Nomura advirtió el lunes que podría enfrentar pérdidas de alrededor de 2,000 millones de dólares.
La magnitud de la potencial pérdida también resalta las dificultades que tiene Nomura para administrar los riesgos de transacciones grandes y complejas
señaló Moody’s
Fitch dijo que su decisión refleja una evaluación del apetito por el riesgo de Nomura y el potencial de una mayor disminución de la reputación y las ganancias.
Moody’s también revisó a la baja este miércoles la perspectiva de Credit Suisse, de estable a negativa, un día después de que la calificadora S&P Global Rating lo hiciera.
Credit Suisse dijo el lunes que podría perder hasta 1,000 millones de dólares en el trimestre, aunque analistas consideran que las pérdidas potenciales serán de entre 3,000 y 4,000 millones de dólares.
Ninguna de las agencias recortó las calificaciones crediticias de los bancos, aunque citaron deficiencias en sus procesos de auditoría y control de gobierno.
Si bien el impacto de la liquidación de Archegos ejerció mayor presión sobre Nomura y Credit Suisse, Mitsubishi UFJ Financial Group también señaló que espera pérdidas de alrededor de 300 millones de dólares
En tanto, otros prestamistas de la family office como Goldman Sachs y Deutsche Bank redujeron a tiempo su exposición sin ningún daño o solo con daños inmateriales, de acuerdo con Bloomberg.
La semana pasada, Archegos Capital recibió exigencias de márgenes, o margin calls, que provocaron una venta masiva de acciones en las que estaba apalancado. La orden fue ejecutada en bloques por Goldman Sachs, Morgan Stanley y Deutsche Bank.
Los problemas del fondo creado en 2013 por el conocido inversionista Bill Hwang son resultado de un apalancamiento que resultó mal. Archegos compró derivados conocidos como swaps de rentabilidad total, que permiten a los inversionistas apostar por los movimientos de precios sin poseer los valores subyacentes.