El Banco Central de Brasil (BCB) subió este miércoles su tasa de interés básica en 0.75 puntos base, a 2.75%, a medida que batalla contra la inflación, una mayor incertidumbre fiscal y una moneda débil a causa de la pandemia de COVID-19.
El aumento, el primero en casi seis años, fue superior a la estimación promedio del mercado, de 0.5 puntos porcentuales, y saca a la tasa Selic de su mínimo histórico de 2%, en el cual se hallaba desde agosto de 2020.
El comité que fija la política monetaria del banco central, conocido como Copom, dijo que su decisión fue unánime y que la inflación que supera su objetivo justificó la decisión.
La situación inflacionaria en Brasil es inversa a la de la mayoría de los países, que prevén un repunte de la inflación cuando la economía se normalice, una vez que una proporción significativa de la población esté vacunada contra el COVID-19.
Fed deja sin cambios su tasa de interés
Los precios al consumidor en el país están subiendo en momentos en que la pandemia acaba con la vida de 2,000 personas por día en promedio. Este miércoles, Brasil reportó un récord de más de 90,000 contagios en un día.
La cifra total de casos por coronavirus en Brasil es de 11.6 millones, con un saldo mayor a 282,000 defunciones, lo que lo ubica como el segundo país más afectado por la pandemia, por detrás de Estados Unidos, según datos de la Universidad Johns Hopkins.
El alza de precios en 12 meses llegó en febrero a 5.20%, un máximo desde enero de 2017, debido al aumento de la gasolina y los alimentos.
La previsión de precios del mercado para este año aumentó a 4.6%, en alza constante desde hace diez semanas.
El Copom recordó que la economía brasileña se contrajo 4.1% en 2020, pero que en el último trimestre se recuperó 3.2% respecto al trimestre anterior, lo cual lo lleva a creer que en el escenario actual ya no se requiere un grado de estímulo extraordinario de la actividad, reflejado en la tasa Selic a 2%.
La decisión se debió a la demanda mundial de productos agrícolas, a la fuerte desvalorización del real frente al dólar y al empeoramiento del cuadro fiscal.
Para su próxima reunión, (el Copom) prevé una continuidad del proceso de normalización parcial del estímulo monetario, con otro ajuste de la misma magnitud, a menos (que ocurra) un cambio significativo en las proyecciones de inflación y el balance de riesgos
dijo el banco central
En lo que va de 2021, el real brasileño acumula una depreciación de 7.5% ante la divisa estadounidense, de acuerdo con el tipo de cambio de Investing.com.
La previsión promedio de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) en 2021 se redujo de 3.43% hace un mes, a 3.23%.
El primer trimestre podría registrar incluso una contracción, agravando la situación social del país que cerró 2020 con 13.9 millones de desempleados, 2.3 millones más que en 2019.
El ministro de Economía, Paulo Guedes, insiste en que la clave del repunte, después de la pandemia, residirá en sus programas de ajustes y privatizaciones.
“El aumento de precios al que asistimos es sectorial y transitorio”, dijo Guedes la semana pasada en una entrevista con el portal Jota. “Brasil se convertirá en la mayor frontera de inversiones de 2021”, pronosticó.
Con información de AFP y Reuters