Los ingresos totales por suministro de bienes y servicios tuvieron en mayo su caída más profunda desde 2009, año en que Inegi comenzó a publicar estos datos, informó este miércoles el instituto.
La caída de 29.5% anual superó a la que se registró en abril de 26.3%, resultado de la crisis económica provocada por la pandemia de COVID-19.
El dato va en línea con las ventas minoristas, que durante el quinto mes del año descendieron 23.4% anual.
La encuesta mensual de servicios (EMS) considera 102 conjuntos de actividades económicas relacionadas con los servicios privados no financieros que operan en el país.
Entre estas actividades están transportes, correos y almacenamiento; información en medios masivos; servicios inmobiliarios y de alquiler de bienes muebles e intangibles; servicios profesionales, científicos y técnicos; servicios de apoyo a los negocios y manejo de residuos y desechos, y servicios de remediación; servicios educativos; servicios de salud y de asistencia social.
Sin embargo, la caída más pronunciada fue en los ingresos por servicios de alojamiento temporal y de preparación de alimentos y bebidas, cuyo descenso fue de 20.2% anual; seguido de los servicios de esparcimiento, culturales, deportivos y otros servicios recreativos con una contracción de 10.5% en mayo, respecto al mismo mes de hace un año.
Al interior, el personal ocupado total tuvo una caída de 9.8% anual; mientras que las remuneraciones totales tuvieron una caída de 12.8%, ambos datos representaron su caída más profunda desde que se tiene registro.
Los gastos totales por consumo de bienes y servicios tuvo un descenso de 22.2% anual, menor a la que se observó en abril que fue de 23.8%, indicó el inegi.