Mientras la carrera por desarrollar una vacuna contra el COVID-19 acapara los reflectores, los grupos farmacéuticos también batallan en otro frente: el desarrollo de tratamientos médicos para atender a quienes padecen la enfermedad.
Este viernes, Pfizer firmó un acuerdo con la compañía estadounidense Gilead Sciences para la fabricación y el suministro de su antiviral remdesivir para trata a pacientes diagnosticados con COVID-19.
Pfizer proporcionará servicios de fabricación por contrato a través de su planta de McPherson, Kansas, dijo el fabricante de medicamentos. No estaba claro de inmediato si produciría solo para el mercado estadounidense.
Gilead busca producir suficiente medicamento a finales de año para tratar a más de 2 millones de pacientes con COVID-19, y acordó enviar casi todo su suministro de remdesivir a Estados Unidos hasta septiembre.
Pero los hospitales se han quejado de las dificultades para acceder al medicamento, uno de los dos que han demostrado la capacidad de ayudar a pacientes hospitalizados con COVID-19 en ensayos clínicos formales.
También se teme que haya escasez fuera de Estados Unidos, y la británica Hikma Pharmaceuticals dijo que comenzó a fabricar remdesivir en su planta de Portugal.
Gilead dijo que su red de fabricación del medicamento había crecido a más de 40 compañías en Norteamérica, Europa y Asia para agregar capacidad.
Otros tratamientos
En total hay 315 tratamientos en desarrollo para atender a personas con COVID-19, según un recuento del Milken Institute, de los cuales algunos ya se encuentran en fases avanzadas de pruebas.
Synairgen
La firma inglesa Synairgen dijo en julio que su medicamento, conocido como SNG001, ayudó a reducir el riesgo de desarrollar de manera grave la enfermedad.
El estudio de la Universidad de Southampton con 101 pacientes llega a la conclusión de que quienes son tratados con el medicamento SNG001 tienen un 79% menos de posibilidades de desarrollar formas severas el COVID-19, a diferencia de los que recibieron un placebo.
Esta evaluación de SNG001 en pacientes con COVID-19 podría indicar un avance importante en el tratamiento de pacientes hospitalizados con COVID-19,
dijo el CEO de Synairgen, Richard Marsden.
Este tratamiento inhalado utiliza el interferón beta, una proteína natural que participa en la respuesta del organismo contra los virus, no obstante, los científicos dicen que se necesitan más datos para respaldar plenamente los beneficios del medicamento.
Tras el informe, las acciones de Synairgen repuntaron hasta 428.77% a 190 libras esterlinas; su capitalización en el mercado es de aproximadamente 326 millones de libras (412 millones de dólares) en comparación con 54.5 millones de libras el viernes.
Universidad de Oxford: Dexametasona
A mediados de junio, la dexametasona fue considerada por los científicos como un “gran avance” para atender a personas con COVID-19.
El estudio liderado por la Universidad de Oxford reveló que las pruebas con dexametasona -que se usa para reducir la inflamación en otras enfermedades- redujo a tasa de mortalidad en alrededor de un tercio entre los pacientes más gravemente enfermos de COVID-19 ingresados en el hospital.
Los resultados del ensayo ‘Recovery’ muestran que el tratamiento con dexametasona potencialmente evitaría una muerte en cada ocho pacientes con ventiladores y una entre cada 25 pacientes que recibieron el fármaco y están en tratamiento con oxígeno.
OMS y otros organismos: Hidroxicloroquina y cloroquina
Ambos tratamientos se han utilizado durante décadas para tratar la malaria y las enfermedades como la artritis reumatoide y el lupus.
A inicios de junio y tras una serie de diferencias con científicos, la OMS reanudó los ensayos con hidroxicloroquina tras haber sido suspendidos por temas de seguridad.
Sin embargo, científicos han dicho que se necesitan estudios más sólidos que perfilen a la hidroxicloroquina como un medicamento para tratar a personas con COVID-19.
México: favipiravir
El presidente Andrés Manuel López Obrador abrió la posibilidad de que México adquiera el medicamento avifavir- conocido genéricamente como favipiravir-, que es producido por Rusia.
Ese ofrecimiento del gobierno de Rusia, nosotros lo recibimos con gusto y desde luego que estaríamos dispuestos a establecer comunicación, estamos dispuestos a eso. Seguramente ya lo contempló el secretario de Relaciones Exteriores y se va a buscar entrar en comunicación con el gobierno de Rusia, que llevamos, dicho sea de paso, buena relación,
dijo el presidente el pasado 13 de julio.
López Obrador dijo que México está participando en varios trabajos de investigación que están haciendo gobiernos y universidades.
El favipiravir fue desarrollado por primera vez a finales de los años 90 por una empresa japonesa comprada posteriormente por Fujifilm cuando se introdujo en el sector de la salud.
Con información de AFP y Reuters