El gobernador de California, Gavin Newsom, anunció una serie de medidas que beneficiarán a migrantes en EU, particularmente California, para hacer frente a los impactos económicos que traiga consigo la pandemia de COVID-19.
Así lo dio a conocer este jueves Jesús Seade, subsecretario para América del Norte a través de su cuenta de Twitter.
El gobernador @GavinNewsom anunció que los migrantes pueden acceder a ciertos beneficios públicos en medio del estado de emergencia por #COVID19, independientemente de su estatus migratorio, decisión que apreciamos enormemente. Más info en: https://t.co/ykdRpcMFpZ https://t.co/TlZzU6XWNj
— Jesús Seade (@JesusSeade) April 16, 2020
Las medidas incluyen el acceso a pruebas y/o tratamiento para COVID-19, a través de los servicios de emergencia de Medi-Cal, en cualquier clínica local, incluso si no se cuenta con seguro o si el estado migratorio no está regulado.
“La atención de Medi-Cal para pruebas o tratamientos relacionados con COVID-19 no están bajo alguna la normativa pública porque se trata del tratamiento de una afección médica de emergencia”, dijo el gobierno de California, donde hasta el 15 de abril se registraban 26,182 casos positivos y 890 muertes, mediante un comunicado de prensa.
Miembros del G-20, las economías más importantes del planeta, aseguran que las remesas que perciben países como México se desplomarán debido a que la pandemia de COVID-19 ya ha afectado también a migrantes en EU.
En el informe presentado este jueves durante la Reunión virtual de Primavera, explican que la caída de remesas se debe a que empleados tanto del sector formal como informal han perdido su empleo y fuente de ingreso.
La captación de remesas de México creció 10.49% durante febrero, en relación al mismo mes de 2019, para llegar a 2,694.2 millones de dólares, de acuerdo con los datos de Banco de México (Banxico) publicados previo al estallido de la enfermedad en Estados Unidos y en México.
Por su parte, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) prevé que el desempleo en Estados Unidos afecte a 330,000 migrantes en EU de origen mexicano.