El plan de inversión que prepara la iniciativa privada en conjunto con el gobierno para impulsar al sector energético ya cuenta, de entrada, con 137 proyectos por un valor de entre 95 y 110,000 millones de dólares, según el jefe de la Oficina de la Presidencia, Alfonso Romo. Esto es cerca de tres veces el monto que calculaban a finales del año pasado.
En 2019, el Consejo Coordinador Empresarial puso sobre la mesa una inversión potencial de 36,000 millones de dólares en el sector energético para el resto del sexenio. Alfonso Romo, por su parte, aseguró en privado que las inversiones serían de hasta 50,000 millones de dólares, por lo que el nuevo acuerdo superaría por mucho esa cifra.
No obstante, será hasta dentro de tres semanas cuando finalmente se presente el plan, debido a diferencias entre la autoridad y los privados sobre cuáles son los proyectos a los que se les dará prioridad.
Esto quiere decir que el número podría reducirse o ampliarse, porque seguimos recibiendo proyectos.
Alfonso Romo, jefe de la Oficina de Presidencia
Romo dijo durante el foro Energy México 2020 que los proyectos fueron entregados desde la semana pasada de mano de Carlos Salazar, presidente del Consejo Coordinador Empresarial, a la secretaria de Energía, Rocío Nahle y a los directores de la Comisión Federal de Electricidad y Petróleos Mexicanos.
Estos involucran a los sectores de petróleo, electricidad, energías limpias, así como de almacenamiento refinación y gasoductos. Hasta el momento no se incluyen contratos de exploración y producción, sin embargo, Romo dejó ver que no quedaban descartados.
Lo que sí habrá, agregó Romo, son contratos especiales en caso de que no se tengan recursos, los cuales utilizarán una fórmula especial para que gane Pemex. “El objetivo es dar certidumbre a la inversión, tanto legal como normativa”, detalló.
Plan Nacional de Infraestructura. Conferencia matutina. https://t.co/6DIHRkpKoh
— Andrés Manuel (@lopezobrador_) November 26, 2019
Romo explicó que, contrario a lo que ha dicho Rocío Nahle, los farmouts no están descartados y que se comenzará a trabajar con todas las opciones en la mesa para después reducirlas, de acuerdo con lo que mejor convenga al país.
Detalló que han tenido reuniones con la funcionaria, quien dice ha mostrado disposición ante el mandato.
Lo importante es que el sector privado sepa en qué sí ahorita y en qué no (…) y en qué tal vez en seis meses.
Durante su participación en el mismo foro, Carlos Salazar resaltó que el problema de la certidumbre “es muy serio” para el gobierno mexicano, porque impide desarrollar un ambiente propicio para la inversión. Entre estos problemas mencionó la normativa nacional cambiante, pero también la falta de una planeación integral.
México no ha tenido ni siquiera bien identificado en un solo paquete sus necesidades de infraestructura, la cantidad de dinero que tiene que utilizar y la cantidad de modificaciones que se deben hacer a la estructura insistente. En los últimos momentos del nacimiento de este proyecto tuvimos que quitar el capítulo de energía por la distinta forma en que Secretaría de Energía y nosotros visualizábamos estos proyectos
Carlos Salazar Lomelín, presidente del Consejo Coordinador Empresarial
El líder del CCE explicó que esta acción se tomó a pesar de múltiples reuniones, pero que son optimistas ante la posibilidad de llegar a un acuerdo y tener una injerencia sobre el desarrollo del país.
En este sentido instó también a los participantes del sector energético a ser más vocales sobre el impacto que tienen los proyectos privados, con el afán de combatir la opinión pública de su falta de eficiencia.
Salazar también explicó que el sector privado está proponiendo inversiones de acuerdo con los lineamientos propuestos por el gobierno federal hasta ahora, pero que no se destacan otras oportunidades de inversión en el futuro.
“Estamos siguiendo el proceso y hay que ver qué pasará con las 110 licitaciones”, dijo.