El CEO de Uber, Dara Khosrowshahi, aseguró que la plataforma de movilidad no está considerando recortar su plantilla de colaboradores pese a que algunas otras grandes tecnológicas lo han hecho como medida para reducir gastos.
Sin embargo, aclaró que la compañía sí está adoptando una postura más conservadora sobre la contratación y las inversiones que realiza.
En 2020 Uber ya realizó un recorte masivo, cuando afectada por el confinamiento implementado para combatir el COVID-19 tuvo que despedir a más de 6,000 empleados, aproximadamente la cuarta parte de su plantilla laboral de ese momento.
Pese a los problemas financieros que están registrando las tecnológicas de diversos sectores, Khosrowshahi destacó que en Uber “estamos viendo cero signos de debilidad”.
Incluso agregó que se han visto beneficiados por el cambio en el comportamiento de los consumidores que han dejado el comercio minorista para gastar en servicios.
Sobre el tema del suministro de conductores en la aplicación, se mostró optimista pese a la escasez prolongada que ha elevado las tarifas y los tiempos de espera.
Nuestra base de conductores ha aumentado sustancialmente
aseguró el directivo.
Caídas en la competencia
Mientras que en noviembre Uber informó que tuvo ingresos por 8,340 millones de dólares, cifra 72% superior a la registrada en igual periodo anterior y que ayudó a calmar las preocupaciones entre los inversionistas por los problemas inflacionarios, los competidores no han corrido con la misma suerte.
La empresa de transporte Lyft anunció el mes pasado que reducirá en un 13% su plantilla de colaboradores, además de que se deshará de su negocio de vehículos propios.
Por su parte, la gigante de entrega de alimentos DoorDash, competidora de Uber Eats, también recurrirá al recorte de 1,250 puestos de trabajos para controlar los gastos.
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