El aislamiento por la emergencia sanitaria del COVID-19 hará que México acelere su paso de manera significativa hacia el uso de los servicios financieros por la vía digital.
Las personas estarán impulsadas a hacerlo no precisamente por gusto, sino para evitar el uso de efectivo o el contacto físico.
En estos momentos donde nadie quiere salir, nos están dejando de visitar los clientes en las sucursales y probablemente acabaremos cerrándolas hasta que esto pase. Todos los que operaban por banca electrónica lo seguirán haciendo y los que no pasarán su operación a esta
Óscar Salcedo, director de banca digital en Banco Multiva
Salcedo comentó que, en los próximos días, lo que más se utilizará es el envío de operaciones a través de transferencias electrónicas como como el TEF (Transferencias Electrónicas de Fondos) y el SPEI (Sistema de Pagos Electrónicos Interbancarios).
Además, debido al aumento de entregas a domicilio, las Terminales Punto de Venta (TPV) también serán requeridas. Incluso, algunos comercios que no las tenían las contratarán en su versión física o virtual.
Repuntes de doble dígito
La banca digital de Santander, en los últimos días días -periodo en el que se acentuó la contingencia en el país- creció hasta en un 20%. El banco a cargo de Héctor Grisi tiene cerca de 4.5 millones de clientes digitales que cotidianamente realizan operaciones desde la aplicación móvil o por medio de la banca en línea.
Banorte y Citibanamex, segundo y tercer banco más grande de México, respondieron a EL CEO que hasta ahora no han presentado un aumento en el uso de la banca digital.
Quizá sea cierto. Según Salcedo, las operaciones de banca electrónica no están incrementando como se pensaría porque la gente no está consumiendo y se mantiene resguardada dentro de sus hogares, por lo que sus necesidades y compromisos económicos son mínimos y centrados en prioridades.
“Mientras las empresas están activas y operando, se hacen decenas, cientos o miles de pagos según a se dediquen, para que vayan quedando las liquidaciones conforme van recibiendo o entregando productos y servicios. Conforme esto va parando, la demanda va cayendo”, dijo Salcedo.
Las operaciones con tarjeta de débito en el cuarto trimestre de 2019 fueron de 1,234 millones. Con tarjeta de crédito fueron 259,000 millones y mediante el SPEI se realizaron 251,000 millones de transacciones, según cifras de Banco de México.
Fintech, la prueba de fuego
No solo los bancos. La coyuntura puede ser otra ventana de oportunidad para las empresas fintech en el país, ya que los clientes potenciales podrán voltear a ver la oferta de servicios, como abrir cuentas sin acudir a una sucursal o bien pedir préstamos personales o corporativos.
“Frente al cierre de sucursales, la sana distancia y el evitar aglomeraciones, las fintech en su versión electrónica se están convirtiendo en un referente. Hay un boom no solo de comercio electrónico, sino el uso de esta tecnología”, dijo Carlos Valderrama, cofundador del despacho especializado en fintech LegalParadox.
Sin embargo, Valderrama precisó que será la prueba de fuego. Gran parte de los productos financieros tendrán un crecimiento, aunque ninguna de las empresas había enfrentado un panorama de pandemia.
Esto va a generar un caos financiero y se van a probar sus sistemas
Carlos Valderrama, cofundador del despacho especializado en fintech LegalParadox.
En cuanto al proceso de autorizaciones para las 94 fintech que realizaron su solicitud ante la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), Valderrama comentó que es fundamental la decisión que pueda tomar el comité interinstitucional conformado por CNBV, Banco de México y SCHP.
Se espera que el resto de autorizaciones sean anunciadas entre abril y mayo, ya que hasta ahora los plazos continuan vigentes a menos que las autoridades regulatorias comuniquen lo contrario.