La pandemia tuvo efectos devastadores para la población en general y exacerbó la inequidad en la región de Latinoamérica, por lo que la innovación tecnológica en el campo de servicios financieros ha sido crucial para ayudar y mantener a flote a pequeñas y medianas empresas (pymes).

Los emprendedores del sector fintech han logrado democratizar los servicios financieros en una región donde siete de cada 10 personas aún carecen de una cuenta bancaria, y ocho de cada 10 no poseen ningún crédito bancario, según cifras del último reporte El estado de salud financiera de las startups en Latinoamérica  realizado por Village Capital.

El documento explica que la mayoría de los países de Latinoamérica están desarrollando innovación de gran importancia en materia de salud financiera: cerca del 75% de las inversiones en el rubro han sido destinadas a emprendimientos en Brasil y México, siendo este último el que ha crecido un 52% en emprendimiento fintech en los últimos tres años.

 Estos datos confirman que las startups de fintech, además de ofrecer soluciones frente a problemas como la falta de recursos crediticios para el consumidor promedio, se están consolidando como una relevante opción en el campo de servicios financieros.

De acuerdo con Village Capital, los usuarios necesitan de un historial crediticio para acceder a una tarjeta de crédito, pero a la vez se necesita de una tarjeta de crédito para construir un historial crediticio. La gente que no cuenta con dicho historial termina por recurrir a préstamos informales bajo condiciones que, generalmente, causan un grave daño a su salud financiera.

 En ese sentido, las fintech están democratizando el acceso a servicios financieros, creando servicios accesibles y económicos para el resto de la población.

 Asimismo, han creado herramientas tecnológicas de financiamiento alternativo y crédito, las cuales ayudan a los pequeños empresarios latinoamericanos a acceder a préstamos seguros y asequibles, y así construir un historial crediticio. 

El reporte de Village Capital señala que las pymes son el pilar más fuerte de la economía de Latinoamérica. En México, según cifras del Inegi, existen cerca de 4.2 millones de pymes, las cuales contribuyen con alrededor del 52% del Producto Interno Bruto y generan el 70% del empleo formal. En Brasil representan el 98.5% de todos los negocios y emplean a más de la mitad de los trabajadores del país.