Las industrias de realidad aumentada y realidad virtual están encontrando un mercado objetivo que tiene mucho poder adquisitivo y un gran interés por encontrar tecnologías innovadoras que agregar a sus recursos tradicionales: el de la educación y el entrenamiento de personal en la industria de la medicina.

Investigaciones independientes y datos recolectados por empresas de tecnología han revelado que el uso de estas herramientas podría reducir los costos de entrenamiento del personal médico, sobre todo en áreas remotas, al tiempo que reduciría riesgos durante cirugías y podría incluso asistir en el tratamiento de ciertos padecimientos como el estrés postraumático.

Un estudio realizado por el departamento de Multimedia y Animación de la Universidad Tecnológica de Tainan, en Taiwán, señaló que las tecnologías de realidad mixta y los wearables aminoran inconveniencias relacionadas con la práctica tradicional de la medicina, al tiempo que reducen prácticas negligentes causadas por la falta de práctica y aumentan la efectividad del entrenamiento.

“La medicina se volverá más efectiva, personalizada y precisa”, explicó Olga Teslenko, ingeniera en Tecnologías de la Información del estudio WEAR en una publicación. “Muchos de los problemas del sector salud se pueden resolver con ayuda de la tecnología y algunas ya se están implementando en Europa y Norteamérica”.

Según cálculos del estudio WEAR, entrenar a un empleado para que realice una inserción traqueal, por ejemplo, tiene un costo regular de 3,000 dólares. Un curso basado en realidad virtual puede disminuir estos costos a 40 dólares por empleado.

El estudio también destacó las ventajas de tener acceso a una visualización 3D de órganos internos durante una operación, lo que ya salvó la vida de un bebé en 2016, y cuyo uso podría expandirse para hacer posibles operaciones que no se podrían realizar de otro modo.

El interés del sector tecnológico en esta área no es nuevo: cuando Google presentó su proyecto Glass, mencionó al sector salud como una de las áreas que potencialmente se beneficiaría de la posibilidad de tener un display a la vista en todo momento.

Microsoft también utilizó como ejemplo al sector salud durante la presentación del HoloLens, su primer aparato de realidad mixta, y en la actualidad incluso tiene alianzas con CAE Healthcare para el uso de HoloLens en simulaciones para asistir a doctores y enfermeras.

Oculus, propiedad de Facebook, se ha enfocado en la asistencia a pacientes para aliviar la ansiedad antes y después de una cirugía, y ha trabajado con VRHealth durante más de dos años.

Estudios al interior de la industria reportan que el mercado de la realidad virtual y aumentada en el sector salud podría alcanzar un valor de 2,540 millones de dólares a finales de este año.

La universidad señaló que en la medida que la industria sea capaz de sortear sus obstáculos principales, como la consolidación de bases de datos, la definición de las pantallas y la durabilidad del hardware, la valuación podría crecer rápidamente.