Google se enfrenta a una nueva demanda antimonopolio de un grupo de fiscales generales estatales liderados por Texas, esta vez dirigida a sus servicios de tecnología publicitaria.
Según la demanda, los fiscales afirman que Google adquirió ilegalmente, intentó adquirir o mantuvo un monopolio en varios pasos del mercado publicitario en línea, incluidos los de compra y venta.
También señalan que Google y Facebook, a quienes denomina “co-conspiradores”, perjudicaron la competencia a través de un acuerdo ilegal para manipular subastas y fijar precios.
Según la denuncia, cuando Facebook anunció en 2017 planes para competir con Google en el espacio de la tecnología publicitaria, el gigante de las búsquedas supuestamente llegó a un acuerdo para detener la competencia. Como parte del supuesto acuerdo, Google otorgaría a Facebook ciertas ventajas en las subastas que realiza para el inventario de publicidad de aplicaciones móviles.
Un portavoz de Google le dijo a CNBC que el reclamo de la demanda de un acuerdo ilegal de manipulación de subastas con Facebook no es exacto.
Facebook Audience Network participa en intercambios fuera de Google, como Fyber, MoPub (intercambio de anuncios de Twitter), Applovin MAX y Ironsource, dijo el portavoz, y agregó que su programa Open Bidding fue diseñado para trabajar con una variedad de redes de anuncios e intercambios.
Otra demanda más se suma a la lista
Además, este jueves un grupo de fiscales generales de Estados Unidos y 35 estados presentaron una demanda antimonopolio contra Google, lo que marca la tercera acción contra la compañía de búsqueda en línea este otoño.
Los estados piden que su demanda se consolide con aquella que presentó el Departamento de Justicia en octubre, según un comunicado de la oficina del fiscal general de Colorado.
La queja se centra en el negocio de búsqueda y publicidad de Google, así como en lo que dijeron que es un esfuerzo de la empresa de utilizar acuerdos de exclusión para dominar nuevas tecnologías como altavoces inteligentes, televisores y autos.
Estas demandas, además de las dos presentadas este mes contra el gigante de las redes sociales Facebook, prometen ser los casos antimonopolio más grandes en una generación, tan importantes como la demanda contra Microsoft de 1998, a la que se le atribuyó la apertura del camino para el crecimiento explosivo de internet.
Con información de Reuters