La justicia austriaca ordenó a la red social Facebook eliminar comentarios de odio dirigidos contra la exdiputada, Eva Glawischnig-Piesczek, informó la agencia AFP.
Dicha sentencia es para que la red social publique, durante seis meses, la decisión de las autoridades en su página de inicio, así como revelar a la denunciante la identidad del usuario.
“Facebook debe informar a sus usuarios de esta condena en un plazo de dos semanas mediante la publicación de un anuncio visible en la parte superior de su página de inicio durante seis meses”, dijo el representante del tribunal.
El juzgado de lo mercantil de Viena, al que Glawischnig-Piesczek acudió en el 2016, falló el 9 de diciembre contra la plataforma, que se negaba a borrar los comentarios difamatorios, explicó a la AFP el portavoz del tribunal, Jürgen Exner. La decisión fue transmitida hasta este miércoles a las dos partes.
Además, la red social estadounidense deberá pagar 4,000 euros (4,500 dólares) por daños y perjuicios a la demandante, dijo el abogado.
La disputa comenzó cuando Eva Glawischnig-Piesczek, ya retirada de la vida política, se quejó de que un usuario de Facebook la llamó en la red social “traidora” y “corrupta”.
Dicha política consideró que el daño se vio agravado por el hecho de que el contenido estaba disponible para los usuarios de la red social en todo el mundo.
Su abogada, Maria Windhager, calificó la decisión como un “avance” contra el odio en las redes sociales, “porque la plataforma siempre se había negado a eliminar los contenidos”.
Ahora informada de la identidad de la mujer que se escondía tras una cuenta anónima, la exdiputada tiene derecho a hacerla pública o a emprender acciones legales contra ella.
Contactado por la AFP, el grupo Meta (Facebook) no quiso comentar la decisión del tribunal.
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Telegram, en la mira
Por otro lado, autoridades de Alemania podrían sancionar a la red social Telegram, debido a que en dicha red se difunden grupos dedicados a difundir discursos de odio.
Desde la difusión de teorías del complot hasta amenazas de muerte, Telegram, particularmente popular entre los movimientos antivacunas, se encuentra en la mira de las autoridades alemanas, informaron diferentes medios internacionales.
Además, acusan a Telegram de pasividad respecto a la difusión de los discursos.
“Nuestra legislación también es aplicable a Telegram (…) podría haber multas millonarias”, advirtió el ministro de Justicia, Marco Buschmann.
La ministra del Interior, Nancy Faeser, quiere presentar antes de Semana Santa un plan que obligue a esta plataforma digital a eliminar mensajes de odio, así como identificar a sus autores.
Sin embargo, a falta de cooperación, Faeser no descarta prohibir por completo esta aplicación en Alemania.
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