El gobierno de Donald Trump en EU tiene en la mira a Reino Unido por los planes de Boris Johnson sobre la construcción de un centro Huawei en Inglaterra.

Huawei, que ha sido objeto de sanciones e intentos de bloqueo por parte de Estados Unidos, planea construir una instalación de investigación en Cambridgeshire, Inglaterra, por una inversión de  400 millones euros para el desarrollo de la manufactura de chips para banda ancha.

Además, aún está pendiente la aprobación de Boris Johnson, primer ministro, de un plan para permitir a Huawei construir parte de su red 5G, pese a la oposición manifiesta de Washington.

Al respecto, el subsecretario de Estado de Estados Unidos para el crecimiento económico, Keith Krach, dijo al periódico Times que a la actual administración le preocupa que un “parásito” se adhiriera a Reino Unido, en referencia a la empresa dirigida por Ren Zhengfei

Mike Pompeo, secretario de Estado de Donald Trump, advirtió el viernes pasado a europeos represalias comerciales si dejan entrar a China, a través de Huawe, particularmente a Reino Unido. 

Pompeo reiteró los llamamientos a los europeos para que eviten al gigante chino de telecomunicaciones Huawei, al que consideró un brazo del “estado de vigilancia” comunista.

Luego de que se realizara una reunión a puerta cerrada con el alto funcionario chino Yang Jiechi en Hawai, el jefe de la diplomacia de Estados Unidos expuso mantuvo su posición de denunciar a Pekín como un “actor deshonesto”, empeñado en alcanzar la dominación mundial.

En Europa, la reacción a los llamamientos de Estados Unidos a tomar una postura más dura ante China ha sido mixta; pues rechazan lanzar una prohibición completa para Huawei, quien tomó la delantera en la construcción de tecnología de quinta generación (5G)

 

Con información de AFP