La pandemia por COVID-19 puso un freno a la operación de distintas industrias en todo el mundo, un fuerte golpe que en algunos casos también resultó de suerte, ante la necesidad de transformar negocios y adaptarse a una nueva realidad que tomó por sorpresa a propios y extraños.
La economía digital, que desde algunos años se desarrolla México y en el mundo, contempla distintos sectores productivos que, a su vez, concentra compañías como Airbnb, Rappi y pequeñas y medianas empresas (pymes), a quienes la contingencia les abrió nuevas oportunidades.
La entrega de productos y servicios, así como de comida o de supermercado dio a varias aplicaciones de la economía digital la oportunidad de transformar su negocio para hacerlo más rentable, pese al impacto que pudieron sufrir dado el cambio de escenario.
La contingencia también cambió los hábitos y costumbres de las empresas pues, según cifras del INEGI, éstas implementaron acciones operativas que contemplan ventas por internet, ventas de nuevos productos o servicios y entrega de pedidos:
Pero no es lo único. La contingencia por COVID-19 no solo hizo necesarios los servicios que ofrecen algunas plataformas, sino que además hizo posible la transformación de negocios para hacerlos más fuertes y rentables, coinciden especialistas de la industria.
Uno de esos casos es Airbnb, quien transformó todo su negocio central de hospedaje por aplicación en impulsar la división de experiencias, ahora virtuales, un nicho que florece en medio de una compleja situación que la compañía enfrenta en el mundo por el supuesto dominio que ostenta.
Las experiencias, que solían ser presenciales, ya sea de índole turística, gastronómica, deportiva o cultural que muchos anfitriones transformaron en experiencias virtuales, aunque Airbnb llegó más allá.
Recientemente anunció un festival de verano de cinco días con Experiencias Online olímpicas y paralímpicas organizadas virtualmente por algunos de los mejores atletas del mundo, con los cuales los usuarios de la app podrán reservar más de 100 experiencias.
Rappi, por su parte, ofrecerá durante las próximas semanas Propio, un servicio de autogestión para restaurantes en respuesta al impacto que ha tenido en la industria de restaurantes el COVID-19.
Las pymes son la sorpresa de la economía digital, pues han impulsado la oferta y la demanda en el país tras el fuerte impacto que provocó la emergencia sanitaria.
Para los especialistas, la importancia de la economía digital es clara desde que lo presencial se tuvo que cancelar y entonces, al hablar de consumo, se va a hablar de reconversión digital.
A eso que llevamos varios años llamándole transformación digital de las empresas significa que tenemos que repensar a las empresas
dijo en entrevista con EL CEO Philippe Boulanger, vicepresidente de Comercio Electrónico de la Asociación de Internet Mx.
Ante la pandemia, el especialista dijo que todo el mundo vio al COVID-19 como un acelerador de la transformación digital, puesto que muchas empresas no estaban preparadas y, al tener que enfrentar de pronto una pandemia, se van a impulsar sectores de la actividad en la primera.
Por su parte Radamés Camargo, gerente de Investigación de The Competitive Intelligence Unit (CIU), dijo que las lecciones que está dejando la pandemia es que ‘no se puede frenar la operación’ porque finalmente las empresas necesitan una estrategia para mantener la generación de ingresos.
Para el especialista, varias empresas sí están reconfigurando su negocio y otras están consolidándose, bajo una estrategia básica para aprovechar el impulso que ha tomado la conectividad, los dispositivos, las distintas capacidades de descarga y de velocidades para impulsar un negocio.
En su opinión, Airbnb busca evitar que el confinamiento no afecte tanto su generación de ingresos, porque justo en el core business es donde ha tenido el mayor impacto.
Las experiencias es una buena manera de seguir consolidando ahí un nicho de negocio y, de alguna forma, tener un canal activo de ingresos para seguir activo en la pandemia