El objetivo de cerrar por completo la brecha digital para evitar que existan ‘dos Méxicos’ -uno conectado y el otro desconectado-, así como lograr una evolución tecnológica a nivel de redes y usos, amén de la regulación y precio del espectro radioeléctrico, son los principales desafíos para 5G sea un realidad óptima en el país.

Esto, sin dejar de lado la urgencia de generar políticas públicas en materia de ciberseguridad y de atender y detonar habilidades digitales en la población.

México tiene un costo de espectro entre 50% y 60% más caro comparado con otros países a nivel internacional, y a pesar de los intentos por evitarlo, la semana pasada el Senado de la República aprobó un aumento de 7%, lo que para los operadores de telecomunicaciones, dificulta tener en el corto plazo condiciones idóneas para el despliegue.

Para el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), otro de los desafíos es convencer al Congreso que el espectro 5G debe ponerse a disposición del mercado en las mejores condiciones, pues México compite con otros países para atraer inversiones.

Además, si bien los resultados del despliegue de redes 5G no son inmediatos, el desarrollo sí es constante.

En consecuencia, aunque el costo del espectro no se va a hacer efectivo durante dos o tres años, pues aún falta una licitación y un lapso para que se desarrollen en redes, los valores siguen siendo 187% por encima de lo propuesto por el IFT.

Por ello, la propuesta del IFT para ser atractivos, a decir del comisionado Mario Fromow “es hacer que se pueda invertir en redes, y creo que de esta forma los ingresos del país están comprometidos”, dijo recientemente en un foro sobre las perspectivas de la red 5G.

En ese sentido, señaló que se requiere que el gobierno cuente con suficiencia presupuestal, aunque el enfoque del Instituto es crear un circulo virtuoso donde se conecten mas usuarios y se paguen otro tipo de impuestos, como el IVA. 

No es conveniente tener impuestos especiales para servicios de telecomunicaciones, sin embargo, en el caso de 5G es determinante el beneficio del usuario para el despliegue eficiente de este tipo de redes, lo que permitiría cerrar la brecha a nivel internacional

Mario Fromow, comisionado del IFT

Para Jorge Fernando Negrete, socio presidente de Digital, Policy &Law, el incremento del precio del espectro radioeléctrico de 7% provoca que México sea el primer país en el mundo en generar una política de Exclusión Digital Universal, es decir, una política de Estado que garantiza la desigualdad y marginación digital.

En su opinión, tanto el gobierno como el Congreso generan el primer ataque sistemático a las instituciones económicas, democráticas y de derechos fundamentales del Estado mexicano.

5G, un cambio de paradigma

Una vez que se dé el despliegue de redes de quinta generación habrá más dispositivos que personas conectadas, lo que va a implicar tanto del punto de vista empresarial como regulatorio cambiar muchos paradigmas, aseguró Daniel Bernal, director de Regulación de América Móvil.

En ese sentido, señaló que no es viable que en México se siga regulando con parámetros del pasado a una industria cuyo objetivo es innovar y desarrollar nuevos servicios.

Uno de los mayores retos como industria y reguladores para generar esos incentivos, a decir de Bernal, es el hecho de que se generen espacios de creación y nuevas aplicaciones, a fin de evitar la paradoja que termine limitando el crecimiento.

Para América Móvil, la evolución a 5G es un asunto de fiabilidad, pues considera que las redes de quinta generación serán redes mucho más confiables en transacciones, alta capacidad de almacenamiento, altas latencias, y, sobre todo, alta conectividad de terminales.

En su opinión, para que 5G sea factible se necesitan portadoras de espectro continuas que permitan la construcción de promesa de valor que trae la tecnología.

De nada sirve 5G si no podemos seguir desplegando y no se generan los incentivos en el mercado para desplegar y llevar la fibra óptica a los lugares más apartados del país

Daniel Bernal, director de Regulación de América Móvil

Al respecto agregó que “no queremos dos Méxicos de realidades distintas”, sino que queremos que se generen los incentivos que permitan seguir invirtiendo en fibra óptica para poder conectar las redes 5G que permitan garantizar los niveles de disponibilidad, calidad y velocidad que se requieren.

Acelerar el paso a la digitalización

El COVID-19 ha sido el acicate más grande para la digitalización, y de un espacio físico que se cierra se abre un espacio virtual, y eso ha llevado la importancia a darnos cuenta que necesitamos acelerar el paso, dijo por su parte Miguel Calderón, vicepresidente de Asuntos Públicos y Regulatorios de Telefónica México.

El operador de origen español busca un régimen fiscal justo que incentive el desarrollo de la infraestructura digital, por lo que se mostró preocupado por el incremento tanto del precio del espectro como del IVA a plataformas digitales.

Ante una nueva realidad, Telefónica propuso un pacto digital a nivel mundial para la recuperación de las sociedades y, para ello, plantea un Plan de 5 pilares:

– Impulsar la digitalización de una economía y sociedad más sostenible

– Abordar las desigulaldades invirtiendo en las competencias digitales

– Construir una conectividad inclusiva y sostenible

– Asegurar una competencia equilibrada

– Mejorar la confianza mediante el uso ético y responsable de la tecnología

Optimizar inversiones, un camino

Si hay mucho espectro, pero no hay fibra óptica, la ecuación está incompleta; por eso, es importante y fundamental buscar la optimización de las inversiones, aseguró Daniel Ríos, vicepresidente adjunto de Asuntos Externos de AT&T México.

Tener mucho más espectro que no esté a precios competitivos a nivel internacional, es un poco un símil de no tenerlo, porque impacta en la manera en que se diseña este caso de negocio

Asimismo, planteó la posibilidad de esquemas de compartición de infraestructura que funcionen de manera adecuada, lo que en su opinión van a permitir que se lleguen a muchos más lugares, de manera que la propia infraestructura se amortice más eficazmente, lo que a su vez generaría más casos de negocio.

Para AT&T México se necesitan fuertes inversiones para hacer frente al acelerado crecimiento de tráfico, pero, al mismo tiempo, a un mayor número de dispositivos conectados, lo que tiene un impacto en los ingresos, por lo que es necesario más espectro.