El Senado de la República aprobó en lo general las ocho leyes secundarias propuestas por la presidenta Claudia Sheinbaum en la reforma energética, lo que le devuelve a Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE), el predominio en sus respectivos ámbitos de ser empresas paraestatales.
El Senado aprobó las leyes secundarias de la reforma energética, con lo que se establece un modelo energético con precios justos y más fuentes sustentables,
escribió el Senado en X.
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— Senado de México (@senadomexicano) February 26, 2025
Las leyes secundarias fueron aprobadas con 84 votos a favor y 39 en contra, devolviendo a Pemex y CFE la prevalencia que solían tener antes de la reforma energética aprobada en el sexenio de Enrique Peña Nieto, como empresas públicas estatales.
El siguiente paso será que las leyes pasen por la Cámara Baja para su aprobación final.
Las disposiciones votadas y aprobadas en el Senado tienen que ver con el sector eléctrico, el sector de hidrocarburos, de planeación y transición energética, biocombustibles, geotermia, y de la Comisión Nacional de Energía.
Senado beneficia a Pemex
La aprobación de estas ocho leyes beneficia a Pemex, que enfrenta complicaciones financieras y que ahora tendrá más libertad y mejores condiciones para aliarse con privados, sin ceder el control de sus proyectos.
No obstante, la compañía tendrá que enfrentar un proceso licitatorio a través de un regulador a fin de migrar asignaciones de contratos de participación mixta, en las que mantendrá el derecho exclusivo del área y no aportará capital.
CFE también se beneficia
La nueva medida también beneficiará a CFE, pues consolidará el despacho prioritario de su energía en la red después de que Andrés Manuel López Obrador lo intentara durante años.
Así, la empresa tendrá que producir al menos el 54% de la electricidad, mientras que el 46% restante podrá someterse a esquemas mixtos de inversión privada con el Estado, que deberá tener al menos el 54% de participación directa o indirecta en los proyectos.
La reforma también establece que el sistema eléctrico tendrá que operar en condiciones de continuidad y confiabilidad, promoviendo la transición energética y la descarbonización.
Con información de Reuters
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