El presidente Andrés Manuel López Obrador aspira a que México llegue a ser un Estado de bienestar, así como Noruega y Suecia. 

“Lo ideal sería que nosotros logremos establecer en la práctica lo que se conoce como Estado de Bienestar, que el mexicano tenga seguridad desde que nace hasta que muere. Ese es un ideal, se ha convertido en realidad en países europeos. Estamos pensando en esa utopía, esa bella utopía, que se pueda convertir en realidad”, dijo López Obrador.

Este sistema político está basado en la premisa de que es el gobierno, y no el individuo, las corporaciones o la comunidad local, el que tiene la responsabilidad de asegurar el bienestar de sus ciudadanos, haciendo que un nivel de vida mínimo esté al alcance de todos. 

Sus compromisos incluyen la provisión de educación universal y gratuita, servicios de salud, seguros contra la discapacidad, la enfermedad y el desempleo, subsidios para la vivienda, suplemento y pensiones de vejez, entre otros.

El modelo se creó en Alemania en 1840 y fue basado en los programas de bienestar en Prusia y Sajonia. Su objetivo era ganar el apoyo de la clase trabajadora.

Actualmente los países nórdicos se encuentran en la cima del ranking de los países más felices del mundo y, de acuerdo con una encuesta realizada por el banco SEB, los ciudadanos de esos países lo atribuyen al  sistema de bienestar.

Aunque este sistema también enfrenta críticas, pues algunos opinan que puede desincentivar el trabajo de los beneficiarios, especialmente si pierden las ayudas cuando elevan su nivel de ingresos.

Además de que, ante el alza en los flujos de migración, muchos ciudadanos se oponen a que los beneficios estén disponibles para los recién llegados. De hecho esa fue una de las razones que llevaron a que el Brexit fuera avalado por la población.

Pero también puede alegarse que el estado de bienestar alienta la productividad, apunta la BBC, pues los empresarios pueden estar dispuestos a tomar más riesgos si saben que sus hijos siempre podrán tener una educación o servicios de salud.

¿Quién paga?

Este sistema es sostenido en gran parte a través del pago de impuestos. Noruega es un país de 5.2 millones de habitantes, quienes pagan algunos de los impuestos más altos del mundo, ya que la tasa máxima de impuesto sobre la renta  (ISR) roza 50% y el IVA alcanza 25%, mientras en Suecia alcanza 57% y 25%, respectivamente.

Esto lleva a que la recaudación en esos países como proporción del PIB supere el 40%, mientras que en México apenas llega a 16%, lo que lo pone en el último lugar entre los miembros de la OCDE. 

Esta mañana, tras los comentarios del presidente, el secretario de Hacienda, Arturo Herrera, se apresuró a recalcar que en México no se planea elevar los impuestos en los primeros tres años del sexenio.

“Me parece que hablar como una aspiración del Estado de bienestar es muy importante, es darle un norte hacia dónde creemos que tiene que ir el país, es pensar cuál es el sistema de justicia y de solidaridad social que requerimos; y después lo vamos a tener que ir construyendo poco a poco y vamos a tener que ir determinando cuáles son los recursos y las contribuciones que todos tenemos que hacer”, dijo el secretario de Hacienda.

Eventualmente vamos a tener que plantearnos qué es lo que queremos del país y cómo lo vamos a ir financiando

detalló.

Entre las medidas ya aplicadas por el gobierno de AMLO con el objetivo de elevar el bienestar de la población, además de la creación de la secretaría con ese nombre en agosto de 2018, el mandatario amplió la entrega de pensiones para adultos mayores.

Además comenzó con la entrega de apoyos para estudiantes de educación básica y el programa Jóvenes Construyendo el Futuro.

AMLO también busca replicar los sistemas de salud del Reino Unido, Dinamarca y Canadá, que tienen en común centralización, supervisión y coordinación del gobierno.