Los precios de garantía son un apoyo a los productores agropecuarios del país, pero se deben atender también otras problemáticas que intervienen en los índices de abandono del campo mexicano, consideró Ezequiel Arvizu, investigador y catedrático de la universidad de Chapingo.
El Gobierno está tratando de abatir la inestabilidad de los precios agrícolas, que es algo que se ha dado desde hace décadas(…) Este programa alivia a los productores a corto y mediano plazo para que ellos mismos decidan si siguen produciendo este tipo de granos o hacen una reconversión productiva. Esto debería ir acompañado de asesorías técnicas, mejoramiento en producción y sistema de riego y uso de fertilizantes.
Ezequiel Arvizu, investigador y catedrático de la universidad de Chapingo
Estos programas de acompañamiento requieren de inversiones de gobierno y de productores por igual. Sin embargo, Arvizu explicó que la falta de sistemas de riego y la dependencia de la producción por temporal ha llevado a varios productores en Oaxaca, Guerrero y el Estado de México a perder sus cosechas y abandonar sus tierras, por lo cual estas inversiones podría resultar muy beneficiosas para prevenir casos similares.
Actualmente, los productores de algunas zonas del país se enfrentan a precios de compra de entre 3 y 4 pesos por kilo. La política de precios de garantía les asegura 5,600 pesos por tonelada.
El impacto del programa será medible cuando la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural actualice sus cifras a finales de este año. En estas nuevas cifras será posible observar el número de productores que cambiaron a trigo, frijol, maíz o arroz (cultivos contemplados en el programa), así como el porcentaje de participación de cada una de estas semillas.
Según datos del INEGI, a 2017 el arroz, trigo y frijol representaban el 16% de la superficie cultivada a cielo abierto en nuestro país. El maíz por sí solo representa el 53%.
Esta es la apuesta de la actual administración, que ha dado peso a programas como Sembrando Vida y Créditos a la palabra para el campo. Arvizu advirtió que se debe ser cuidadoso con ellos, pues los tratados comerciales firmados por nuestro país nos vuelven vulnerables a acusaciones de nuestros socios comerciales por subsidios del Estado.
Gerardo Tajonar, presidente de la Asociación Nacional de Importadores y Exportadores de la República Mexicana, explicó que acusaciones de este tipo tendrían que estar acompañadas por un proceso legal que avale que se trata de un subsidio que favorece a la industria mexicana sobre el país comprador.
Probablemente sí exista ese riesgo, pero habría que revisarlo caso por caso. Eso se tiene que demostrar cuando ves que el precio al que se ofrece en el mercado nacional está por encima del precio de exportación(…) Algunos productos que se exportan también se pagan a un precio diferenciado porque el mercado de exportación sí alcanza a pagar por esa calidad superior a la del mercado local.
Gerardo Tajonar, Presidente, ANIERM