Nota del editor: esta noticia se publicó originalmente el 7 de octubre a las 13:35 horas

Los bloqueos de taxistas realizados el lunes en la Ciudad de México fueron hechos por el 0.4% del universo de concesionarios, afirmó la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum.

En un video publicado en Twitter el mismo lunes, la cabeza de la administración local sostuvo que los manifestantes están enojados porque el gobierno capitalino ha tomado acciones para acabar con la corrupción y garantizar la calidad y la seguridad de servicio.

Afirmó además que en la mesa de diálogo creada en la Secretaría de Gobernación, los taxistas se comprometieron a no realizar más bloqueos.

La argumentación de Sheinbaum fue similar a la expuesta más temprano por Secretaría de Movilidad en un comunicado, donde se indicó que el diálogo con los taxistas siempre ha estado abierta, pero que no se puede regresar a prácticas opacas que benefician a unos cuantos y que afectan a la mayoría de los taxistas y sus usuarios.

La dependencia capitalina sostuvo que ha tomado medidas para terminar con la corrupción en trámites relacionados con concesiones de taxis, como la digitalización de la revista, y con ello el cierre de los centros El Coyol y La Virgen.

Afirmó que ya está disponible la primera fase de una aplicación gratuita para taxistas en la Ciudad de México, y que a finales de año estará completamente terminada a fin de cerrar la brecha entre los servicios de transporte privado vía apps y los taxistas.

Además, indicó que solicitó a Secretaría de Gobernación la instalación de una mesa de diálogo con los manifestantes de otras entidades del país, quienes, agregó, deberían protestar en sus propios estados.

Apuntó que en la mesa participaría la Secretaría de Gobierno de la Ciudad de México.

Pidió a los manifestantes que atiendan la potencial mesa de Gobernación y que sea mediante el diálogo como sus demandas sean atendidas.

Taxistas mantuvieron este lunes protestas en varios puntos de la capital mexicana, ocasionando severos problemas de movilidad.

Los manifestantes mostraron su rechazo a la operación de estas firmas de transporte de personas vía aplicaciones, como Uber o Didi, pues consideran que no hay piso parejo.

Una representación de taxistas dialogó desde el mediodía con el subsecretario de Gobernación, Ricardo Peralta.

Los taxistas reclamaron  que los automóviles particulares que utilizan aplicaciones como Uber no requieren pagar una concesión para prestar el servicio de transporte de pasajeros como ocurre con los taxis normales.

Señalaron que el pago de los trámites para operar un taxi puede ascender a cerca de 100,000 pesos  al incluir la licencia, el precio de las placas y la revisión que hacen las autoridades del vehículo anualmente.

Solo nos han escuchado pero nada han resuelto en contra de las aplicaciones extranjeras, saben que son ilegales,

dijo durante un mitin en el centro de la capital Ignacio Rodríguez, vocero del movimiento de taxistas.

Las protestas abarcaron varios puntos de la ciudad y generaron caos vehicular en diversas zonas, incluyendo el vital Paseo de la Reforma, el aeropuerto internacional de la capital y Santa Fe, un área en la que trabajan miles de personas en diversos corporativos.

Muchas personas tomaron precauciones para evitar el tránsito ya que las autoridades advirtieron desde antes por las protestas. Las manifestaciones contribuyeron a empeorar el tránsito de Ciudad de México, que ocupa el cuarto lugar a nivel mundial con el peor tráfico del mundo solo detrás de Bogotá, Moscú y Estambul, según la consultora Inrix.

Los taxistas, al igual que transportistas de varias ciudades del mundo, han realizado una serie de manifestaciones en la capital y en otras ciudades del país para exigir el retiro de las aplicaciones.

En abril de este año, el gobierno de la ciudad instauró una licencia para quienes manejan a través de las aplicaciones e instauró una revisión física y mecánica de los vehículos, como la que tienen que pasar cada año los taxis.

Con información de AFP