El gobierno de México desplegará 1,800 soldados y policías en Tijuana, debido al incremento de homicidios en la zona, que ha estado en la mira del gobierno estadounidense tras la llegada de miles de migrantes centroamericanos que buscan el sueño americano.
“El lunes empezamos este plan en Tijuana, en efecto ha crecido el número de homicidios (…) y es de las ciudades en donde ha habido más violencia en estos últimos tiempos”, dijo el presidente Andrés Manuel López Obrador en su conferencia matutina.
El secretario de Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, explicó que la intención es “cubrir la ciudad, dividir la ciudad en diferentes sectores” que serán resguardados por soldados, policías federales y estatales que se unirán al dispositivo ya desplegado actualmente.
Se trata de “una suma de 1,800 hombres trabajando en el área”, aseguró.
En Tijuana, numerosos cárteles se disputan el tráfico de droga a Estados Unidos así como el tráfico de indocumentados.
Por su vibrante frontera con San Diego se realizan cuantiosas transacciones comerciales y pasan diariamente miles de personas que viven y trabajan en ambos lados de la línea limítrofe.
Tijuana registró la cifra récord de 2,518 homicidios durante 2018, contra los 1,781 de un año anterior, según cifras oficiales.
Desde noviembre pasado, miles de centroamericanos -la mayoría familias con niños- han logrado llegar a Tijuana tras viajar en caravana desde Honduras, con la esperanza de llegar a Estados Unidos para pedir asilo y encontrar una vida lejos de la pobreza y la violencia en sus países.
Esto desató la furia del presidente Donald Trump, quien calificó las caravanas centroamericanas de “invasión” a su país y desplegó miles de soldados en su frontera sur.
Además de poner trabas en el proceso de petición de asilo a los centroamericanos, insiste en la costosa construcción de un muro fronterizo para evitar la inmigración ilegal.
Con información de Reuters