El exsubgobernador del Banco de México (Banxico), Gerardo Esquivel, advirtió que desaparecer el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) restaría credibilidad en la medición de pobreza.
Lo importante es que se mantenga la confiabilidad en las cifras y para eso lo que se requiere mantener una órgano colegiado, académico y autónomo, que pueda garantizar que la medición (de pobreza) se hace con criterios rigurosos y que las cifras pueden ser confiables,
dijo a medios de comunicación.
El pasado 23 de agosto, la Comisión de Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados aprobó en lo general la reforma promovida por el expresidente Andrés Manuel López Obrador, que busca la extinción de órganos autónomos como el Coneval.
La iniciativa de reforma constitucional tendrá que ser presentada en el Pleno de la actual legislatura para hacer un hecho la desaparición de los órganos autónomos, bajo el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.
La propuesta refiere que las funciones del Coneval se trasladarían al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Gerardo Esquivel dijo que cualquier institución podría medir la pobreza, pero “lo que se requiere es garantizar la credibilidad. La credibilidad se le otorga con un órgano académico, independiente y colegiado (…) Desaparecer el Coneval no sería una buena idea”.
Explicó que Coneval tiene la enorme ventaja de contar con un órgano colegiado de académicos que garantizan la rigurosidad, el uso de la información, el procesamiento y los criterios para medir la pobreza.
Coneval y Cofece no responden a intereses del gobierno
El economista mencionó que los órganos autónomos, como Coneval y la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece), tienen una lógica y un sentido en ser independientes.
Los órganos autónomos sirven para dar, insisto, de alguna manera esa independencia en ciertas decisiones, esa capacidad de tomar decisiones que no responden al gobierno en turno
dijo.
Esquivel añadió que la autonomía sirve para garantizar que las decisiones correspondan a elementos técnicos y no respondan a presiones políticas. “Esa es la lógica de los organismos autónomos. Tampoco es un capricho”.
Desde su punto de vista, la Cofece tendría que ser fortalecida en lugar de buscar desaparecerla “para darle dientes”.
Se puede discutir cosas formales de cómo se nombran los comisionados, pero creo que la esencia en ambos casos es sobre la confiabilidad en la institución y en las decisiones que van a tomar
concluyó.
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